El cuerpo: sujeto y objeto
MI REENCUENTRO CON EL... ARTIUM ·
Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
MI REENCUENTRO CON EL... ARTIUM ·
lucía aguirre
Sábado, 6 de junio 2020
Tras unos meses en los que hemos vivido con muchísima preocupación, y aunque no debemos bajar la guardia, poco a poco tenemos que ir abriendo puertas que nos permitan airear tanto los espacios como las mentes. Los museos pueden contribuir con su apertura a que ... nos activemos, interactuando con el arte que en ellos se muestra. En este sentido, una obra que considero interesante y que tenemos la posibilidad de ver en la presentación de la colección de Artium 'Zeru bat, hamaika bide. Prácticas artísticas en el País Vasco entre 1977 y 2002' es 'Acciones corporales' (1975), de Esther Ferrer.
Esta obra de la artista donostiarra ha sido adquirida recientemente para la colección de Artium, pero se trata de una pieza histórica en la que Ferrer nos presenta su cuerpo desnudo mediante varias acciones performativas. Creada en una década complicada, en el marco de un momento histórico convulso, Ferrer formaba parte entonces del ya desaparecido colectivo ZAJ, y acababa de regresar de la gira norteamericana del grupo para asentarse definitivamente en París. En la capital francesa, el artista Benet Rosell le ayuda a registrar algunas de sus acciones más conocidas, como una versión temprana de 'Íntimo y Personal' (1977), 'Huellas, sonidos, espacio' (1968) o 'Midiendo el espacio con el cuerpo', todas ellas recogidas en 'Acciones corporales' (1975).
En 'Acciones corporales', el cuerpo desnudo femenino es sujeto y objeto, es medida y es medido, activo y pasivo. Ferrer nos atrapa con movimientos simples, en un espacio despojado de objetos, salvo la silla, enser cotidiano, útil, tan característico de sus trabajos. Nada queda al azar, toda acción surge de una partitura, de un estudio detallado de cada movimiento a realizar, que la artista ejecuta con precisión. El cuerpo de la mujer se automide, se confina y se «domestica», deja sus huellas invisibles, y con ello Ferrer nos sitúa ante los cánones de belleza, el lugar que se nos deja ocupar como mujeres en el espacio público y el uso que se nos permite de nuestro cuerpo.
Casi cinco décadas después de que estas acciones fueran realizadas y registradas, su actualidad resulta incómoda, por no decir luctuosa, porque deberíamos observarlas y analizarlas con la distancia histórica que les corresponde, relacionándolas con un contexto ya pasado, pero han quedado congeladas en el tiempo y son de una inaudita contemporaneidad, como el discurso que Esther Ferrer lleva desarrollando más seis décadas.
Localización. Sala A0, dentro de la muestra 'Zeru bat, hamaika bide' de la Colección Permanente.
Características. Vídeo-performance.
Creación. 1975. Adquirida por Artium a la galería Àngels de Barcelona en 2019.
Noticia Relacionada
Noticia Relacionada
Noticia Relacionada
Noticia Relacionada
Noticia Relacionada
Noticia Relacionada
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.