«Es la primera vez que me pasa venir jugando bien y que no me salgan las cosas», dice Rahm

Resignado. Es el calificativo que mejor puede definir el estado de Jon Rahm tras terminar la segunda jornada en el PGA Championship, un día cargado de incertidumbre puesto que tuvo que esperar hasta última hora para confirmar su adiós al segundo 'major' de la temporada. No pasó el corte.

«Creo que no he fallado un golpe a la derecha en toda la semana. Todos los errores han sido a la izquierda. No sé muy bien qué ha pasado. No sé si es que estaba apuntando mal, que no suele ser habitual en mí, o que apuntaba demasiado y después no desgiraba bien el cuerpo. Me ha sorprendido mucho por lo bien que venía jugando. Es la primera vez que me pasa, que vengo jugando muy bien y no me salen las cosas en un torneo», explicó el vizcaíno sobre su juego.

Fue, sin duda, un mal día con el drive. «Si no coges calles en este campo complicado. He metido un par de putts buenos pero una pena que muchos de los que he tirado no han entrado por poco». Un dato: solo cogió seis calles de quince y sus errores vinieron siempre por el lado izquierdo, 21 en total entre jueves y viernes.

El de Barrika se agarra a un filo hino de esperanza. «Si no llueve... Por lo menos que haga un poco de viento, y que haya suerte. ¿Mis errores? Son cosas que pasan. Por ejemplo el 7. Si la pongo en calle es un hierro al green, pero lo he leído mal. El agua ha hecho que tenga problemas con el efecto», ha valorado Rahm tras una jornada donde predominó la lluvia.

El vizcaíno se refirió también al triste episodio ocurrido a primera hora y que ha hecho que la jornada se retrasara una hora y media, motivo por el que se deberá completar mañana. «Alguien ha fallecido cuando venía a trabajar para el torneo atropellada por otra persona que venía a trabajar. Es triste que haya una familia que tenga que despedirse de un ser querido».

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