El Athletic invita a soñar

Una noche fría y lluviosa de enero en un San Mamés vacío y con el Getafe como rival. A eso se le llama bajar al barro de la trinchera en esa larga guerra que es la Liga. Pues bien,

El partido, sorprendente por la dimensión que acabó alcanzando el juego ofensivo del Athletic -el cuarto y el quinto gol provocaron incluso perplejidad por su fulminante precisión- comenzó, sin embargo, de la peor manera. En realidad, con un nuevo récord de Marcelino, pero en este caso uno tan curioso como desagradable: el de ser el primer entrenador del Athletic que no ve un gol que le marcan a su equipo.

El caso es que, cuando llegó al área técnica, Marcelino ya tuvo que dedicarse a animar a sus jugadores para que se recuperasen de ese mazazo tan tempranero. Y eso, ciertamente, lo hizo a la perfección.

Era muy ilustrativo observar a Vencedor y Dani García tocando siempre rápido, lo mismo que Raúl García. Y qué decir de Muniain, olvidando sus conducciones inanes y apostando siempre por la verticalidad. El capitán rojiblanco ha dado un paso al frente magnífico con la llegada de Marcelino. Su pase a Raúl García en el 1-1, girándose y poniéndola con la izquierda, fue soberbio. Si añadimos el que le dio a Yeray para hacer el 2-1 en la segunda parte y sumamos los de la Supercopa nos queda una estadística llamativa: en apenas tres partidos ya ha dado más asistencias de gol que en toda la pasada temporada.

El empate terminó de agrandar a un Athletic que pasó a dominar y a llegar con peligro al área de Yáñez. Les faltó suerte a los rojiblancos en algunas llegadas peligrosas, siempre tocando rápido y apareciendo con mucha gente arriba, pero la tuvo en el minuto 27, cuando a Unai Nuñez le pitaron uno de esos irritantes penaltis de VAR y Unai Simón lo solucionó a lo grande parando la pena máxima a Mata. Era el primer penalti que un portero del Athletic detenía en Liga después de tres años. El último fue Kepa. Otro signo del cambio de los tiempos, podríamos decir, que en otras cosas ha traído también las convenientes dosis de fortuna. El desperdicio del penalti dejó tocado a un Getafe impotente ante el despliegue rojiblanco y con

El partido, pese a todo, estaba en el aire en el descanso. Podía pronosticarse una pelea a cara de perro. Lo que ya resultaba más difícil de aventurar era el estallido de un Athletic espectacular que haría trizas a su rival con una auténtica exhibición. Tanto tiempo hablando de las dificultades de los rojiblancos con el gol y, de repente, realizan una demostración brutal de verticalidad y eficacia. Todo le salió rodado a la tropa de Marcelino, que se adelantó en el minuto 50 gracias a un magnífico cabezazo de Yeray. Su primer gol en el primer equipo. Una vez obtenida la ventaja, volvió a ser inevitable preguntarse por cómo iba a gestionar el Athletic su renta. Pues bien, l

• Temas
• LFP Liga de Futbol Profesional
• Athletic
• Getafe CF
• Bilbao
• fútbol
• Primera División