Los sindicatos desconvocan la huelga en los colegios concertados al llegar a un acuerdo con la patronal

El documento firmado pasada la una de la madrugada, por todos los sindicatos menos LAB, responde a las principales reivindicaciones de los trabajadores. Se pueden resumir en tres puntos. Una subida salarial del 16% en el periodo 2021-2024, lo que garantiza recuperar el poder adquisitivo perdido desde que caducase el convenio, hace tres años; el blindaje del instrumento para la recolocación del personal; y medidas para aliviar la carga de trabajo (por ejemplo, una hora de clase menos a la semana).

Los trabajadores también han rechazado la propuesta de la patronal, avalada por el Gobierno vasco, de homologar los salarios al de los trabajadores de la red pública en 2027, como han hecho en las ikastolas. Los sindicatos creían que eso les restaría capacidad de negociación en el futuro.

El acuerdo pone fin, de esta manera, a una huelga que se ha alargado durante catorce jornadas de paros (trece en este curso), afectando al día a día de los centros de iniciativa social. Uno de los principales escollos era la recuperación del poder adquisitivo perdido durante los últimos tres años (el IPC ha subido más del 16%). Otro, el blindaje de los puestos de trabajo en un contexto de caída de la natalidad. Y un tercero, el alivio de las cargas de trabajo.

La jornada fue frenética y miles de familias se fueron a la cama sin saber si sus hijos tendrían clase hoy. Por la mañana, varias federaciones de asociaciones de padres y madres (que representan a más del 30% de las familias de todo el sistema educativo vasco) hicieron público un duro comunicado en el que acusaban a los sindicatos de utilizar a sus hijos como «rehenes» de un «conflicto político». A media tarde, la patronal convocó a los sindicatos (ELA, Steilas, CC OO, LAB y UGT) a una reunión en la sede del Consejo de Relaciones Laborales, en Bilbao.

A brazo partido

Fueron unas horas de negociación a brazo partido, con reuniones bilaterales, llamadas, intercambio de papeleos y acaloradas discusiones. La última palabra la tuvo ELA, que representa a la mayoría de los trabajadores del sector.

Fue la decimonovena reunión entre trabajadores y patronal. La anterior tuvo lugar el pasado viernes. Hasta ahora, las conversaciones habían encallado en los puntos mencionados. Pero no sólo por el contenido, sino también, según denuncia la patronal, por la «estrategia» desplegada por los sindicatos. Los trabajadores, a su vez, cargaban contra Kristau Eskola y Aice-Izea porque, aseguran, no se han movido hasta que se han puesto en marcha las huelgas. Y hasta que la presión de las familias ha llegado al máximo.

El pasado sábado, centenares de familias del colectivo 'AMPAs unidas' se manifestaron en Bilbao para reclamar una solución. A ellas se les unieron ayer las federaciones de asociaciones de padres y madres Fapae, Feguiapa, Fapacne y Bidelagun. Su mayor temor, no obstante, es verse en las mismas dentro de unos años. Porque ya pasó lo mismo a finales de 2019. Entonces se puso fin a 29 días de huelga que se alargaron durante tres cursos consecutivos. Cuatro años después, se ha vuelto a firmar un acuerdo de madrugada. Pero las partes se han emplazado a negociar en 2025, lo que arroja la duda de si volverá a vivirse la misma situación.