Urkullu dice que la izquierda abertzale «cargará» con «el lastre» del terrorismo

A ese mismo lugar se trasladó ayer Urkullu para conmemorar el 60 aniversario de la compañía, dirigida por la segunda generación de los Korta. Y allí, en Zumaia, ante la familia del empresario asesinado, el lehendakari se esforzó en recordar el pasado y la responsabilidad de quienes apoyaron el terrorismo y todavía lo justifican.

Durante su intervención, Urkullu alabó la figura del expresidente de Adegi. «Joxe Mari se convirtió, muy a su pesar, en símbolo de la libertad y la democracia. Defendió el diálogo y el entendimiento entre diferentes. Incansable trabajador, tenaz, exigente y, a la vez, generoso. Fue una persona entregada a las demás, dispuesto a ayudar a todo el mundo. Hoy volvemos a mostrarle nuestro reconocimiento y aprecio», destacó el jefe del Ejecutivo autonómico.

Pero no sólo eso. Porque lo que también hizo Urkullu fue lanzar un mensaje de profunda carga política y moral hacia la izquierda abertzale. En un momento, además, en el que EH Bildu trata de acercar posturas con el mundo empresarial para defender su propuesta de política industrial para Euskadi. Una apuesta que se ha traducido en varias reuniones mantenidas por Pello Otxandiano, director de Estudios y Programa de la coalición y candidato a lehendakari, con representantes de las patronales.

«La mayor lacra»

Pero para el lehendakari es importante recordar que «durante décadas hemos sufrido a quienes entendieron que la construcción de un país no debía realizarse desde el trabajo, el emprendimiento y el esfuerzo; que en esa construcción no cabían las personas emprendedoras y de empresa como Joxe Mari».

En un mensaje dirigido directamente a EH Bildu, aunque en ningún momento nombró de forma explícita a la coalición, aseguró que el terrorismo «es un lastre con el que muchas personas tendrán que cargar el resto de sus vidas». «Cuando oímos voces que todavía hoy les justifican o amparan, se nos encoge el corazón y se nos revuelve nuestro interior», afirmó el lehendakari, quien recalcó que esas acciones terroristas fueron «la mayor lacra de nuestro país, la peor cara del ser humano».

Urkullu aseguró que Euskadi «mira al futuro con la ilusión» que Korta «contagiaba» y recalcó que el País Vasco «crece y prospera». «Nuestro país avanza gracias a personas emprendedoras que hoy comienzan un sueño, que llevan a la práctica con valentía esa idea que barrunta en su interior desde hacía tiempo, aplaudimos el paso que dan y les animamos a que persigan su sueño», destacó.

El asesinato de Korta se entendió como un mensaje contra los empresarios. Solo un mes después, ETA colocó una bomba contra la discoteca 'Txitxarro' de Deba, también propiedad de la familia Korta.