El día que Zidane entregó a Nadal su primer Roland Garros

El destino había escrito su reencuentro. Ha llovido. Incluso mucho más que este viernes en París. Era 2005 y un imberbe Rafa Nadal acababa de ganar su primer Roland Garros. Era su primera Copa de los Mosqueteros, el sueño cumplido de un chaval de 19 años de Manacor. Y fue Zinedine Zidane el que se la entregó, sonriente, en la pista Philippe Chatrier cuando todavía era futbolista del Real Madrid, del que el balear es fiel seguidor. Un año después colgaría las botas.

Este viernes, cuando parecía que Zidane era el elegido para encender el pebetero, apareció Rafa Nadal para coger el testigo de la antorcha olímpica. Toda una sorpresa. Han pasado muchas cosas desde estos dos momentos en París. El veterano atesora ya 14 Roland Garros cuando ya afronta la recta final de su carrera. Y 'Zizou' cambió las botas por los banquillos, desde los que precisamente ha devuelto la gloria al Real Madrid en dos etapas: tres Champions y dos Ligas, entre otros títulos.

Las luces se apagaron y, entre la penumbra del río Sena, surgió Nadal con la antorcha. A bordo de una lancha, junto a Serena Williams, Carl Lewis y Nadia Comăneci. Cuatro leyendas bajo la fuerte lluvia que empapó París. Ya acabado el trayecto en la barca, la antorcha entonces pasó a manos de Amélie Mauresmo, extenista (ganadora del Abierto de Australia y Wimbledon en 2006) y directora de Roland Garros desde 2021.