El aeropuerto de Bilbao perdió en abril el 99% de sus clientes por el virus

Entrando al detalle en las cifras del batacazo, el Covid-19 ha hecho que el aeropuerto registrara un tráfico promedio de 47 pasajeros al día. Las operaciones han caído también de manera abrupta, con sólo 248 movimientos (8 despegues y aterrizajes al día).

La actividad es ahora mismo nula en 'La Paloma'. Para mañana sólo hay previsto un vuelo con Sevilla. En la última semana ha habido incluso jornadas en las que no se ha registrado ninguna operación.

¿Qué se puede esperar a partir de ahora? En principio, lo peor debería haber pasado ya. En las próximas semanas se prevé que algunas aerolíneas vuelvan a volar, a medida que los países vayan reabriendo sus fronteras con la desescalada. Hoy mismo, la Comisión Europea ha insuflado un balón de oxígeno a las aerolíneas, al asegurar que no es imprescindible dejar asientos vacíos para volar y tampoco ve con buenos ojos las cuarentenas indiscriminadas (España ha dicho que pondrá a los extranjeros que entren en el territorio 14 días bajo confinamiento).

La UE recomienda el uso de mascarillas y aprovechar los potentes sistemas de refrigeración y depuración del aire que poseen los aviones comerciales. Es una buena noticia para un sector clave en la economía mundial. En lo que respecta a Loiu, Ryanair anunció ayer que quiere volver el dos de julio a 'La Paloma' para seguir operando su enlace con Londres, algo que, en este momento, se antoja muy complicado, sobre todo teniendo en cuenta que el Reino Unido está en una situación peor que España y que ya no pertenece a la Unión Europea.

Por ahora en Bilbao sólo vuelan Iberia y Vueling. Volotea y la Generalitat Valenciana han anunciado también que este verano quieren unir Bizkaia con el aeropuerto fantasma de Castellón, a partir de julio. En las próximas semanas se da por hecho que se reabrirán algunas rutas importantes, pero recuperar la situación anterior al Covid-19 requerirá de un esfuerzo titánico y de mucho tiempo (más años que meses).

Antes de la pandemia, Loiu se preparaba para vivir el mejor verano de su historia, con seis nuevos enlaces y 56 rutas, lo que le hacía soñar con romper, a final de año, por primera vez, la barrera de los seis millones de pasajeros.