Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
En EEUU están sorprendidos de que Trump de positivo en algo. Tras su debate haciendo de Tonetti y una supuesta evasión de impuestos, trago de lejía y todo blanqueado. Visita blanca a Gasteiz, ante 400 afortunados, como inicio de una Euroliga atípica y con el ... deseo de ponerle las cosas negras al ilustre vitoriano de los banquillos.
Empezábamos cargando bien el rebote de ataque pero sin llevarnos una canasta a la boca; dos minutos muy futboleros con un 0-0 a la italiana. Randolph, Campazzo y Vildoza se negaban a mantener las puertas a cero y comenzaron a acertar desde la lejanía para entretener a los suertudos aficionados asistentes. Golpe de Henry preocupante y alternancia de canastas entre aros con las pérdidas asumidas por la voluntad de correr. Luca tomó el papel de líder sin encontrar pareja que se sumase a sus bailes, por contra entre los visitantes unos cuantos se subían al Carroll. La entrada de Diop y Polonara le sentó tan bien a nuestro equipo como esa equipación verde de la que tanto disfrutamos en su día, y así se puso punto final a un primer cuarto igualado en números y sensaciones. Lo de Pierriá quedó en susto, y Rokas comenzó de muerte, el segundo cuarto, para ponernos por primera vez por delante aunque el acierto de ambos equipos jugaba al escondite. Errores compartidos, balones extraviados e idas y venidas como pollos sin cabeza. Dusko sacaba a los jóvenes para devolverlos al toallero, en un visto y no visto, al ver que no estaban para esos trotes. Fall daba sus primeros pasos y Peters con otro rebote y un triple daba muestras de que sabe cómo se debe andar. Gracias a las buenas digestiones de sus pérdidas, el rebote en su casa, unos libres bien aprovechados y a pesar de la clase de Thompkins, nos íbamos a vestuarios con una ventaja exigua pero muy 'Arguiñana': Rica, rica.
Inicio trompicado al que Alec y Facu ponían algo de clarividencia. Faltas a tutiplén y juego con espinilleras y botas de tacos donde los del silbato acaparaban el juego. Entre su minúsculo pero gran base, la manita de Jaycee y una canasta de su gigantón volteaban el resultado más por defecto que por exceso. Aquello era una batalla de cuerpo a cuerpo en la que los pupilos de Ivanovic se mueven como peces en el Buesa. Todos los nuestros atrás en plena vendimia, es decir a por uvas, y en ataque como un vino de garrafón de esos que dan dolor de cabeza. Diferencias en un pañuelo, baloncesto para utilizarlo y quitarte las lágrimas, y muchos viajes al tiro libre a pesar de las restricciones de movilidad. Henry manejaba los hilos y Peters la madeja, con esa clase que da gloria verla, para finiquitar el tercer cuarto volviendo a asomar la testa. Los porcentajes como para llamar a Tezanos y las defensas abrumando a los ataques. Lo de Pierriá un escándalo en ambos aros; además de su habitual trabajo defensivo, ayer dio una exhibición de fundamentos ofensivos que catapultaron a un Baskonia al que no le afecta el aforo de las iglesias porque está lleno de creyentes. Empezábamos a encontrar transiciones amigas, y a los que siempre juegan con sus muñecas para rematar a un Madrid al que convertimos en vulgar. Confinamos a los madrileños de la mano de un base como las rastas mandan y les dimos´pal' pelo..
Un Baskonia real, en un último cuarto de ensueño, pasó por encima de un Madrid sin alma ni acierto. Libreto de clase, esfuerzo y acierto de un Henry que se paseó como quiso y cuando le salió de sus rastas. Magníficos Peters, Vildoza y Rokas como escuderos del mayúsculo base. Impecable carta de presentación ante un asintomático equipo blanco.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.