Yeray, sobre Vivian y Paredes: «Los que tienen que jugar son ellos»

Valverde metió siete cambios para refrescar el equipo. De todos ellos, los mejor parados fueron Adu Ares, chispeante y el único que intentó algo en la primera parte, y Yeray, muy sólido y sin fisuras. Desde que las molestias de pubalgia dijeron basta el pasado mes de mayo en Villarreal y se vio obligado a ser operado poco después, Yeray ha vivido una montaña rusa de desgracias físicas. Se perdió los primeros encuentros de Liga, regresó, pero se vio obligado a pasar de nuevo por el quirófano en octubre por una desinserción del aductor.

Sus números son devastadores. En los últimos ocho meses sólo había jugado cinco partidos y llegaba a Cádiz como el rojiblanco con ficha del primer equipo con menos minutos, 183. Para colmo vivió un proceso de regreso plagado de leves recaídas que retrasaban su reaparición pese a llevar ya mes y medio trabajando con los compañeros.

A cambio, ofreció en Cádiz un rendimiento incluso mayor del previsto. «He estado un poco dubitativo porque no sabía si podía aguantar los 90 minutos, pero me ha dicho que estaba bien», relató el entrenador al concluir el partido. Yeray se las vio con el máximo goleador del Cádiz, el peleón Chris Ramos, un delantero de los de brega constante. El central mantuvo la calma en todo momento y frenó al atacante amarillo.

«He pasado momentos de incertidumbre, de no saber cuándo vas a volver, pero los compañeros me han hecho llevarlo mejor. Lo he disfrutado como un aficionado desde arriba, pero estoy supercontento por sentirme bien», reflexionó. Al concluir el duelo, el baracaldés habló de que siente haber vivido un punto de inflexión. «Quería tener la confianza y volver a sentirme futbolista y creo que lo he conseguido. Estoy supercontento por ello».

Yeray estaba señalado como el primer central del Athletic tras la salida de Iñigo Martínez. Vivian y Paredes han jugado toda la campaña a un excelente nivel, al punto de que son los dos jugadores rojiblancos con más minutos.

A pesar del brillante partido que firmó, Yeray no salió a reivindicar protagonismo inmediato en el equipo. Todo lo contrario. No se quiere plantear expectativas elevadas. Su criterio es que Paredes y Vivian se tienen que mantener en el once y que a él le toca esperar su oportunidad. «Vivian y Paredes han estado a un nivel altísimo. Yo estoy para ayudar en lo que necesite el equipo. Los que tienen que jugar son ellos, que llevan una temporada estupenda, con muchas porterías a cero y no hay que cortar la dinámica del equipo. He vuelto ahora y me toca ayudar», indicó. No es habitual escuchar a un jugador decir que deben ser sus compañeros y no él los que aparezcan en el once.

Valverde por el momento le ha recibido por todo lo alto. «Le he visto bien», se alegró. «Iba a decir que para nosotros es un gran fichaje», se sinceró ante los informadores. «Es un jugador que durante la temporada ha participado poco y nos va a poder ayudar».

Para el entrenador es un refuerzo importantísimo ahora que busca amarrar la plaza europea y volver a la final de Copa. Valverde ya tiene por fin tres centrales de cuna a su disposición. El cuarto jugador en esa posición es un lateral reconvertido, Berchiche, y el quinto, Nolaskoain, a quien el Eibar desea recuperar y en donde jugó como medicocentro defensivo.

No sólo regresó el Yeray jugador. También lo hizo el jugador que no tiene pelos en la lengua para hablar sin tapujos cuando no le gusta un encuentro. «Nos ha faltado juego, ritmo y cometer menos errores. Podíamos haber tenido más pausa con el balón. Ha sido un partido feo, feo», resumió con franqueza.