El Ministerio prioriza el nudo de Arkaute para acelerar el desvío de mercancías por el norte

Los gobiernos central y vasco ultiman la encomienda para ejecutar las obras del nudo de Arkaute, uno de los últimos tramos pendientes para la llegada de la alta velocidad a la capital alavesa. La última previsión que manejaban ambas administraciones contemplaba la firma del acuerdo para este mismo mes de julio o, a más tardar, para septiembre, por lo que será cuestión de semanas.

Se trata de uno de los dos proyectos que asumirá el Gobierno vasco a través de Euskal Trenbide Sarea (ETS) en territorio alavés, junto con el propio soterramiento de la estación de Dato. A pesar de que existe un protocolo que recoge esa encomienda desde hace dos años, el traspaso para construir el futuro apeadero no se encuentra tan avanzado como el de Arkaute.

Pese a su menor trascendencia en comparación con la estación del centro de Vitoria, la infraestructura es básica para el despliegue de la alta velocidad y, sobre todo, para incrementar el tráfico de mercancías. El recién aprobado estudio informativo de la llegada del TAV contempla tres vías de acceso, dos de ellas con ancho de vía estándar para su conexión con el resto de Europa. Este es un aspecto clave para que el tráfico de mercancías por ferrocarril despegue por fin, con el impulso del nuevo nodo logístico que se proyecta en Júndiz, y que podrá albergar convoyes de 750 metros.

El nudo de Arkaute permite «independizar» el tráfico de mercancías de los servicios de pasajeros de media y larga distancia de forma relativamente sencilla, precisamente lo que busca el Ministerio para agilizar la posible variante del norte de Vitoria y garantizar la fluidez del tráfico en un eje estratégico. La variante, además, persigue reducir las afecciones de los trenes en la ciudad, al evitar que atraviesen la trama urbana de Zabalgana a Salburua, que se quedan con las vías en superficie. En paralelo, la infraestructura aumenta la capacidad del tráfico de mercancías, que sería más difícil de lograr en caso de que el túnel del soterramiento se quedara pequeño.

Transportes ya ha puesto sobre la mesa un posible trazado para las mercancías. Arranca en la zona oeste de Júndiz, y después rodea Vitoria por el norte de Lopidana y Gamarra Menor, y por el oeste de Zurbano. Ambas líneas (mercancías y pasajeros) vuelven a reunirse junto al nudo de Arkaute. No obstante, el análisis que se encuentra en elaboración perfilará el recorrido definitivo que se someterá al estudio informativo y, después, al proyecto constructivo. Esto implica que todavía puede sufrir algunas variaciones hasta convertirse en realidad.