Desayuno de domingo con... Nina: «Como la primera vez no hay ninguna. Pasó con 'Operación Triunfo': éramos todos vírgenes»

XL. ¿Le gustaría que la echaran de menos?

N. Sí, claro. Todos tenemos nuestro ego y me halagaría, pero yo prefiero que todos los proyectos triunfen, esté yo en ellos o no, porque eso es bueno para la industria y para todos.

XL. Reconozca que si no es por la guerra de Ucrania Eurovisión 2022 no lo hubiera visto casi nadie.

N. Hace años que yo no sigo Eurovisión y te diré, para serte sincera, que me interesa poco. Este año lo vi solo por Chanel, con la que trabajé en Mamma mia! y me gustaba mucho su apuesta.

XL. Pues con OT pasa un poco lo mismo, ¿no le resulta ya cansino?

N. Como la primera vez no hay ninguna, eso pasa con todo en la vida. En aquella aventura, todos éramos vírgenes, nosotros y el espectador, y salió algo extraordinario. Es muy difícil repetir aquello, no se puede forzar la máquina muchas veces.

XL. Por cierto, se le va a acabar poniendo cara de Meryl Streep.

N. ¡Y tanto! [Ríe]. Aunque la película de Mamma mia! se estrenó cuatro años después de que yo hiciera el musical en España. Pero ya me gustaría parecerme a Meryl Streep en algo; es mi actriz favorita de siempre. Pude conocerla y hablar con ella, y me encantaría que viniera a ver el musical de Los puentes de Madison, aunque, si lo hiciera, me pondría muy nerviosa.

XL. La historia es superpotente, pero podían haber adaptado un poquito el final para salir del teatro más contentos de lo que lo hicimos al ver la película.

N. Pues sí; no hubiera estado mal, pero hay que ser fiel a lo que se escribió. La historia es tan brutal que, durante las tres primeras semanas de ensayo, no paramos de llorar en algunas escenas. Esta vez no es fácil llegar a casa y olvidarte del personaje.

XL. ¿Conoce alguna relación larga en la que la rutina no cause estragos?

N. Yo llevo veinte años de pareja y puedo decir que la rutina aparece cuando te olvidas de que hay que cuidar al otro cada día de tu vida. No podemos dar absolutamente nada por hecho.

XL. ¿Cada día? ¡Qué agotamiento!

N. ¡Jajaja! Yo tengo al lado un hombre maravilloso, generoso y paciente.

Tostadas impares

«Los domingos desayuno dos tostadas con aguacate y una tercera con mermelada de fresa. Para beber, un café con leche».

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