PASO A PASO
1. Calentamos con antelación el horno a 200 ºC. La masa quebrada o de hojaldre la podemos encontrar en el comercio ya elaborada y estirada. Bastará con untar el fondo de un molde redondo desmontable con una pizca de mantequilla y espolvorear luego con un poco de harina.
Acomodamos entonces la masa en el fondo del molde, apretando bien en todo su perímetro y recortando el sobrante. Metemos el fondo de tarta en el horno y lo horneamos entre 8 y 10 minutos, el tiempo justo para que la masa se cueza ligeramente, sin que coja nada de color. Dejamos enfriar ligeramente el fondo de tarta horneado, metido en su molde.
2. Mientras, cortamos las cebolletas en tiras finas y picamos los dientes de ajo. Con una pizca de aceite de oliva o mantequilla, sofreímos las cebolletas y los ajos con un poco de sal, hasta que se doren ligeramente.
3. Acabado. mezclamos en un bol los huevos y la nata y salpimentamos. Echamos el sofrito de cebolla y ajo en el fondo de tarta horneado y, por encima, esparcimos con las manos el queso desmenuzado.
Espolvoreamos unas hojas de tomillo, deshechas con las yemas de los dedos, y vertemos la mezcla batida sobre el molde, que horneamos unos 20 minutos.
4. La tarta debe formar una costra apetitosa y bien dorada. Sacamos la tarta del horno y la dejamos templar ligeramente antes de servirla.
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Para empezar con la receta de tarta de cebolla y queso, se acomoda la masa en el fondo del molde, untado antes con mantequilla y espolvoreado con harina.
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Se mezclan en un bol los huevos y la nata y se salpimienta. Se reserva esta preparación, que echaremos luego sobre el fondo de la tarta.
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Se coloca el sofrito de cebolla y ajo en el fondo de tarta horneado y, por encima, esparcimos con las manos el queso desmenuzado.
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Se coloca el sofrito de cebolla y ajo en el fondo de tarta horneado y, por encima, esparcimos con las manos el queso desmenuzado.
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¡Y listo! Ya tienes tu receta de tarta de cebolla y queso terminada.
Truco
Para evitar que la mezcla se derrame del molde en el viaje que hacemos desde la encimera hasta el horno, conviene verter la mezcla siempre en la boca misma del horno y de a poco.
El vino
Clunia Malbec 2015. El enólogo Pablo Pávez estudió unas parcelas en el límite de altura para el cultivo y, tras buenos resultados con cepas de syrah y tempranillo, elaboró este estupendo monovarietal de malbec en edición muy limitada. Una explosión frutal de gran concentración
y persistente final (22 euros). J. L. Recio