El supuesto chantaje de José Luis Moreno

El dossier que manejan en el espacio de Cuatro descubre escándalos en cada una de sus páginas. Según el sumario se habrían grabado escenas eróticas fuera de guión solo para gusto de Moreno y éste estaría dispuesto a hacer públicas imágenes muy comprometidas para Roemmers si el empresario le denunciaba por estafarle 32 millones. «Si los enseña (los whatsapp) no puede salir de casa en treinta años», aseguraban. Preguntado por ello, el entrevistado, con rostro oculto, respondía: «Dos señores maduritos, con sus gustos y sus cosas… Yo creo que todos lo entendemos. Yo he oído que el señor Moreno se ha ido a alguna fiesta privada con el señor Roemmers. Y en las fiestas de estos señores no se qué puede haber para que uno se avergüence tanto que si se sabe no pueda salir a la calle. Lo podemos imaginar», dejaba caer.

Aguilera mandaba un dardo al juez que instruye la causa. «Yo creo que esto es un sumario por encargo», denunciaba. La periodista quiso saber de quién. «De alguien que no aparece ahí. Estamos hablando del señor Roemmers que tiene el monopolio de muchos medicamentos en Argentina, una de las mayores fortunas mundiales. Puede hacer lo que quiera, eh. Aquí hay un sumario y no sale el teléfono de Roemmers por ningún lado, hay conversaciones con todo el mundo, pero con él no hay», advertía. Y remataba: «Igual ganaría (Roemmers) la forma de joder a Moreno sin que se sepa que ha sido él, ¿no?».

En otra parte del expediente de la 'Operación Titella' puede leerse que el ventrílocuo carga contra su socio inversor. «Ha hablado de cárceles cuando el que lo puede meter en la cárcel soy yo por lo de Panamá y lo de Malta. Ha ido muy lejos y no quiero seguir trabajando con él», dicen los papeles. «Yo no se si es yonqui del dinero, si sé que es una persona que tenga lo que tenga lo gasta y no mira por él. Los que están a su alrededor se han aprovechado. Cuando estás rodeado de mucha gente en tu casa que vive de ti, que no hace nada, que no genera nada y que solo te aporta gastos el dinero se acaba», valoraba Aguilera para zanjar la cuestión sobre los gustos exquisitos de Moreno: «Que yo sepa le gusta viajar, lo de más no es un señor de gustos. Conmigo ha comido en bares de menú de diez u ocho euros».