La Rioja quedará confinada desde el viernes, pero no cierra ningún municipio ni la hostelería

La presidenta de la comunidad, Concha Andreu, ha anunciado este mediodía unas restricciones que se quedan a medias con respecto a lo que se especulaba en las horas previas. Unas medidas que prohiben la entrada y salida de la comunidad autónoma, salvo las excepciones habituales y de fuerza mayor, pero que no llegan a las más extremas que estaban sobre la mesa: ni toque de queda ni cierre total de la hostelería ni confinamiento de ningún municipio concreto.

Eso sí, según Andreu algunas de esas medidas no son todavía descartables. No hay de momento toque de queda, esa medida «no está sobre la mesa»; pero si se decide, como es posible, en el seno del Consejo Interterritorial de estos días en el que se reúnen las comunidades y el Ministerio, La Rioja la tomará también.

Y no se cierra ningún municipio, ni siquiera se recomienda no salir de ellos. O se hace, pero indirectamente: el Gobierno pide a los alcaldes que recomienden a sus vecinos no salir de los términos municipales. «Recomendación, no prohibición», ha recalcado la presidenta a preguntas de los periodistas.

- No se puede entrar o salir de La Rioja, salvo las excepciones habituales: trabajo, cuestiones sanitarias o académicas, cuidado de dependientes, retorno a la residencia habitual... El BOR que se publicará mañana incluirá un documento modelo para acreditar las excepciones. También se permite el tráfico «de paso», con origen y destino fuera de la comunidad.

- Todos los establecimientos abiertos al público cerrarán a las 21 horas, salvo farmacias, supermercados, teatros y cines, así como otros establecimientos que vendan «bienes y servicios de primera necesidad». También podrán funcionar los establecimientos que vendan comida a domicilio, exclusivamente para ello.

- En el comercio y hostelería, hay nuevas restricciones de aforo: en general, en todos los interiores será de 50%. En el exterior de los establecimientos de hostelería, del 60%, pero se establece una distancia mínima de metro y medio entre las sillas de una mesa y las de otra. Y el grupo máximo en terraza seguirá siendo de 6 personas.

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- En los lugares de culto se establece un máximo aforo de un tercio, aunque siempre que haya una distancia de metro y medio entre personas. En los velatorios el máximo será de 10 personas en interiores o de 15 en exteriores incluyendo los entierros.

- La práctica deportiva en grupo tendrá un máximo de seis personas. En las instalaciones deportivas de interior el aforo máximo será del 50%, y del 60% en las exteriores.

-Podrán entrar y salir de La Rioja los equipos que participen en competiciones profesionales

- En las competiciones oficiales de ámbito estatal y carácter no profesional y las competiciones internacionales se aplicará el Protocolo de actuación para la vuelta de competiciones oficiales de ámbito estatal y carácter no profesional en la temporada 2020/2021, elaborado por el Consejo Superior de Deportes.

Está previsto que estas medidas y su detalle se publiquen en el BOR de este jueves y entren en vigor a las 00:00 horas del viernes, 23 de octubre. Permanecerán vigentes durante quince días, hasta las 00:00 horas del sábado, 7 de noviembre.

Todas estas medidas refuerzan y complementan la normativa de prevención sanitaria aprobadas previamente por el Consejo de Gobierno el 1 de septiembre, 7 de septiembre y 16 de septiembre, que permanecen vigentes, así como sus posteriores modificaciones y prórrogas.

«El gobierno tiene la obligación de ser el arquitecto de las medidas»; señalaba Andreu en la rueda de prensa aunque, explicaba, hay otras administraciones implicadas. Pero también los ciudadanos: «Los sanitarios están saturados psicológica y físicamente, y tenemos que ser responsables. El control de la pandemia es responsabilidad de todos y cada uno de los riojanos y riojanas», afirmaba.

«Estar en casa no nos protege de la transmisión del virus a otros miembros de la unidad familiar», recordaba. «En los aislamientos debemos extremar las precauciones. Podemos hacerlo bien, lo sabemos, porque la experiencia nos avala». Y citaba casos de éxito: la vendimia, o el inicio del curso escolar. «Los centros escolares siguen siendo lugares seguros».

«La mayoría somos responsables, pero se trata de que los pocos no responsables, que los hay, echen por tierra el cuidado de la inmensa mayoría de la sociedad», explicaba. «En el control de esta pandemia, no vale que la mayoría cumplamos, debemos cumplir todos y todas; porque si unos pocos fallan, aunque sea una minoría, fallamos todos». «Debemos ser muy conscientes de ello, esto no es un juego, estamos hablando de vidas, de nuestras vidas, de las de nuestros familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo o de cuadrilla», afirmaba.

«Detectamos cada vez más casos, pero si no los detectamos a tiempo la capacidad de transmisión de esta enfermedad se multiplica. Cada persona no diagnosticada, puede contagiar en un par de días a otras cuatro. Y el crecimiento será exponencial». «Tenemos comprobado que los brotes y contagios se producen en el ámbito social. Y ese contexto se da en el salón de una casa o en una comida de amigos en una bodega», explicaba.