Osakidetza pagará más a los médicos para que hagan horas extra y salvar el verano

Para tratar de mantener estos meses una adecuada cobertura asistencial a la ciudadanía en un escenario de carencia de profesionales la nueva cúpula de Osakidetza va a poner en marcha una serie de «medidas excepcionales». Las principales son la mejora del precio de las horas extra a sus médicos y ofrecer a residentes en sus últimos tres meses de formación realizar las funciones de los facultativos estatutarios y pagarles como tal.

Esas son las principales propuestas que se recogen en la instrucción que ha remitido Susana López Altura, nombrada el pasado lunes nueva directora general del Servicio Vasco de Salud, a las organizaciones sanitarias y a la que ha tenido acceso EL CORREO. El escrito, fechado el 24 de julio, prevé que estas medidas especiales tengan un carácter temporal. Solo estarán en vigor durante julio, agosto y septiembre. Están ideadas principalmente para hacer frente a la situación de la Atención Primaria, los PACs y las Emergencias, aunque también se pueden beneficiar de ellas los servicios hospitalarios para reducir sus listas de espera.

Y es que si hay un nivel asistencial donde el escenario es más complicado este es el de la Atención Primaria. A lo largo de todo hay unas 200 plazas estructurales de facultativo sin cubrir por falta de profesionales. En verano estas carencias se agudizan aún más por las vacaciones de la plantilla. Consecuencia de esta falta de personal es que, solo en Bizkaia, Osakidetza ha reducido este verano el horario en 87 de sus centros de salud, mientras que otros 32 registran cierres puntuales durante algunos días. Esta situación ha hecho que los alcaldes de Plentzia, Gorliz, Urduliz y Lemoiz reclamasen este pasado miércoles el refuerzo de la atención sanitaria que se presta en estos municipios durante la época estival. También ha habido protestas en Ondarroa o Berriz, entre otros lugares, por la falta de facultativos.

Las «medidas excepcionales» propuestas por Osakidetza en su instrucción -la primera que emite López Altura como directora general- tienen como objetivo reforzar el servicio. Con el aumento de las tarifas de las horas extra Salud busca animar a más médicos a cubrir los turnos que hayan quedado vacantes durante estas fechas. Solo en los PAC Osakidetza estimaba que podrían rondar el millar, según denunciaron en junio el Sindicato Médico de Euskadi y ELA.

La segunda línea, la contratación de galenos residentes en formación que se encuentren «en los últimos tres meses de su periodo formativo», puede suponer un importante balón de oxígeno para Osakidetza este verano. Y es que Salud contrató el pasado año al 80% de los residentes que acabaron su formación en Euskadi. Hay unos 300 (109 de ellos médicos de familia y 22 pediatras) que afrontan ahora sus tres últimos meses de formación y, por tanto, son candidatos a ser contratados gracias a esta instrucción.

Lo llamativo de esta segunda medida es que es contraria a lo que había determinado el Ministerio de Sanidad. El Gobierno central indicó en junio a las comunidades que no podían contratar a estos médicos en calidad de adjuntos hasta que no completasen su formación. Sin embargo la instrucción emitida por la directora general de Osakidetza se apoya en la ley de ordenación de las profesiones sanitarias de 2003. En ella se establece que los residentes deberán asumir, de forma progresiva, «responsabilidades propias» de su especialidad y que la labor de supervisión, además de por su tutor, podrá ser realizada por «otros profesionales que presten servicios en las distintas unidades donde se formen los residentes». Es decir, podrán realizar funciones de forma autónoma, pero solo en ambulatorios en los que haya otros facultativos que les supervisen. Los MIR que sean contratados pasarán consulta en aquellos centros de salud «que precisen refuerzos o tengan especiales necesidades de cobertura».

La instrucción incrementa hasta los 70,08 euros el precio de la hora extra a aquellos médicos de familia que atiendan pacientes fuera de la jornada ordinaria. Cuando lo que hagan sea prolongar su horario para atender el cupo de pacientes de otro compañero ausente se les retribuirá con 119 euros por día. En los PAC y Emergencias la hora extra se abonará a 70,08 euros entre las 8 y las 22 horas y a 38,48 entre las 22 y las 8. Además se prevé un complemento de otros 12,66 en el caso de fines de semana y festivos. Los MIR que se acojan de forma «voluntaria» a esta iniciativa recibirán las mismas retribuciones que los facultativos estatutarios. Todas estas «medidas especiales» han sido consultadas por el consejero de Salud a integrantes de diferentes organizaciones sanitarias, entre ellas al Sindicato Médico de Euskadi.

El éxito que pueda tener en los próximos meses esta iniciativa para hacer frente a los problemas de falta de médicos de Osakidetza en algunos ámbitos y garantizar la cobertura de la ciudadanía en los diferentes niveles asistenciales es incierto. Quizá sea insuficiente al llegar prácticamente a mitad de verano, pero lo que parece evidente es que tanto el consejero Alberto Martínez como la nueva cúpula que ha nombrado al frente de Osakidetza están planteando desde el primer momento en el que han llegado al cargo -la directora y otros dos altos cargos del Servicio Vasco de Salud fueron nombrados el lunes- iniciativas para paliar el que es uno de los mayores problemas de la sanidad vasca y una de las principales reclamaciones de la ciudadanía: la falta de médicos en Atención Primaria.