La contracumbre del G-7 empieza a armarse

El objetivo principal de este colectivo es seguir las diferentes actividades de la contracumbre en un ambiente festivo y «en las mejores condiciones posibles». Incluso se ha preparado un área especial para los chalecos amarillos, que tomarán parte en la anticumbre que se desarrollará desde mañana hasta el domingo en Ficoba y en Hendaia.

El que acude a Urruña «es un público militante que no tiene por qué compartir la misma causa, pero al que le parece interesante escuchar al resto y aprender un poco de todos», explican desde la organización, que aseguran que no van a permitir «ninguna actitud agresiva ni opresiva hacia ninguna persona».

Los primeros ya han pasado una o incluso dos noches en Urruña, pero el programa principal no comenzará hasta mañana. Durante estos días reclamarán «alternativas comunes al modelo económico capitalista», según desveló ayer la portavoz del colectivo Attac Madrid, Cuca Hernández. Este evento alternativo, organizado bajo el lema 'Defendamos nuestras alternativas', contará con más de un centenar de actividades como conferencias y talleres.

Si bien 'G-7 Ez' y 'Alternatives G-7' han organizado sus charlas en Ficoba y Hendaia, critican que «los poderosos del mundo hayan blindado» la cumbre «con policía armada hasta los dientes» y anuncian que los participantes en la «contracumbre» reivindicarán «por tierra, mar y aire, y armados de razón, que otro mundo es posible».

Por su parte, una de las organizaciones participantes en este evento, Ecologistas en Acción, lamenta «la reacción de las élites políticas» a la «contracumbre», después de que, en su opinión, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente francés, Emmanuel Macron, «se hayan coordinado para desplegar un operativo policial solo comparable al de cumbres como la del G-20 en Hamburgo de 2017».

Ecologistas en Acción reprocha también la supuesta existencia de una campaña para «criminalizar a un sector de los colectivos asistentes, con el fin último de ahogar las voces más críticas, crear divisiones en el movimiento, construir legitimidad para militarizar la zona y tomar medidas de excepción».

Asimismo, la contracumbre reunirá a representantes de distintos colectivos sociales, organizaciones y sindicatos con el objetivo de poner de manifiesto las «falsas retóricas» y «forjar una red internacional para construir alternativas reales a un sistema que no respeta la vida en ninguna de sus formas y que conduce al fin de las sociedades humanas actuales y a una extinción masiva de especies».