El Gobierno dará hasta 4.000 euros a los hosteleros, que las juzgan insuficientes

Sánchez agradeció el «gesto y esfuerzo» del Gabinete de Urkullu, pero insistió en que existe aún un «margen muy importante» para corregir las diferencias existentes, que considera salvables. «Siempre es mejor 30 millones que nada», confesó, al tiempo que aplaudió las intenciones de Hurtado de agilizar los procedimientos para que las ayudas lleguen lo antes posible a unos hosteleros que viven una situación «crítica».

El consejero de Turismo compareció a la conclusión del Consejo de Gobierno, junto al portavoz, Bingen Zupiria, para presentar un programa de 30 millones de euros, con lo que el Plan de Resistencia alcanza los 70, de «los que 45 son exclusivamente para la hostelería». Las partidas económicas se distribuirán en función del número de trabajadores de los negocios.

Los establecimientos con hasta tres empleados podrán percibir 3.000 euros; los de entre 4 y 10, 3.500; y los de más de 10, 4.000. La intención es que los empresarios que se acojan a este programa reciban las ayudas antes de fin de año. «Instauraremos un procedimiento ágil para llegar al mayor número de familias de forma efectiva y rápida», adelantó Hurtado. Los beneficiarios únicamente deberán acreditar el número de trabajadores con los que dicen contar y podrán empezar a tramitar las solicitudes a partir de la semana que viene. «El compromiso de este Departamento con el sostenimiento del empleo es firme», subrayó el consejero socialista, que ha apelado a la «colaboración institucional» para revitalizar uno de los sectores más castigados por el coronavirus.

Hurtado explicó este martes que 25 de los 30 millones los aporta el Departamento de Economía y Hacienda y los otros 5 la consejería que él dirige. «Estos 5 millones proceden de remanentes de las anteriores ayudas extraordinarias Covid 19 en la parte dedicada al comercio», detalló. Un equipo de control «urgente» integrado por al menos 20 técnicos se dedicará «en exclusiva a la gestión» de este programa, que complementa las ayudas destinadas tanto por la Administración autonómica como por «otras instituciones. Todas son compatibles» razonó.

Como contrapartida de este «plan de choque», los hosteleros se tendrán que comprometer a mantener la actividad durante al menos 4 meses, «una vez se levanten las restricciones de apertura». Hurtado se congratuló de que esta medida vaya dirigida a autónomos y propietarios de micro y pequeñas empresas y resumió su objetivo primordial en la necesidad de asegurar la continuidad de la actividad hostelera, contribuir a paliar las pérdidas económicas y garantizar el empleo de los 12.219 establecimientos censados en Euskadi, del que viven más de 66.000 personas.

Entre los hosteleros existe la impresión de que las partidas del Gobierno vasco quedan muy por debajo, por ejemplo, de las establecidas por la Xunta de Galicia, que destinará entre 2.500 y 7.000 euros a los titulares de cada negocio. En un clima de cordialidad, Sánchez, que reconoce las «dificultades presupuestarias», tendió la mano al Ejecutivo y aseguró que las cantidades que restan hasta completar los 187 millones pueden asignarse a otros ejercicios. «Seguiremos insistiendo en que se nos debe compensar por lo mal que lo pasamos».