El líder del PSE, Eneko Andueza, interviene ayer en el pleno del Parlamento vasco en presencia del lehendakari Urkullu. blanca castillo

PNV y PSE ultiman un pacto para dar prioridad a la escuela pública y a los resultados académicos

Los jeltzales asumen gran parte de las exigencias socialistas y presentarán hoy unas bases conjuntas para el acuerdo educativo

Viernes, 4 de marzo 2022, 00:43

Salvados por la campana. PNV y PSE cerraron ayer, prácticamente al cien por cien, un acuerdo sobre la reforma del sistema educativo vasco, en vísperas de que venza hoy el plazo para presentar enmiendas al texto original elaborado por el presidente de la ponencia, el ... jeltzale Gorka Álvarez. El consenso en torno al documento, hecho público a principios de febrero como un esfuerzo de síntesis entre los dos socios del Gobierno de Iñigo Urkullu y EH Bildu, se vio atascado apenas unos días después por las serias reticencias del PSE, que dio un golpe en la mesa para exigir a Educación, en manos del PNV, cambios de calado que les permitieran respaldar el borrador.

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Los socialistas no estaban cómodos ni con la equiparación 'de facto' entre la escuela pública y la concertada ni con hacer del euskera el «epicentro» del proyecto. Ambos conceptos se han afinado y corregido en la nueva redacción que hoy verá la luz para poner el foco en fortalecer la red pública y dar prioridad a los resultados académicos del alumnado además de a la competencia lingüística en las lenguas cooficiales. «Ha habido avances significativos, sí», corroboran en el PSE. Fuentes jeltzales confirman, igualmente, que han adaptado el texto a las exigencias «conceptuales» de sus socios.

Texto «de bases»

El documento acordado por Bildarratz y Retortillo evita concreciones, que quedan para el articulado

En definitiva, el consejero Jokin Bildarratz y el responsable de Educación en la ejecutiva del PSE, Alfredo Retortillo, que han llevado personalmente la negociación, han limado las aristas que más incomodaban a los socialistas pero sin descender al detalle. Es decir, el texto mantiene el espíritu de documento «de bases», más bien genérico, y no será hasta que el Consejo de Gobierno apruebe el texto articulado, previsiblemente en otoño, cuando se pongan negro sobre blanco los asuntos más espinosos de la futura norma. La previsión de los socios es que el trámite legislativo se alargue durante el año 2023 y la ley pueda estar lista antes de que concluya la presente legislatura.

De momento, ganan tiempo y salvan una discrepancia que se antojaba peligrosa para la estabilidad de la hasta ahora plácida coalición PNV-PSE al afectar a un asunto de país. De hecho, el lehendakari Urkullu encarriló personalmente el acuerdo en la reunión que mantuvo con Eneko Andueza el martes y un día más tarde empujó públicamente para dar por hecha la fumata blanca. La escenificación del pacto también se ha cuidado: previsiblemente el consejero Bildarratz presentará en persona el documento, además de los portavoces parlamentarios, por separado, de ambos partidos en asuntos educativos.

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Fricciones

El debate sobre las cuotas de la concertada podría alejar a Bildu, con gran presencia en las ikastolas

Financiación

Los socialistas creen que se han atendido sus demandas en los cuatro ejes que consideraban insoslayables. En primer lugar, para dejar claro que es preciso poner «especial cuidado y atención» en fomentar la educación pública, sin meterla en el mismo saco que la concertada. De fondo, sobrevuelan las quejas políticas y sindicales por la intención de eliminar las cuotas de los colegios privados que han firmado conciertos con la Administración. El asunto de la financiación no se abordará directamente en el borrador, sobre todo porque puede alejar de saque a EH Bildu, con fuerte presencia en la red de ikastolas concertadas. «Nadie contempla que Bildu se salga. A nosotros no nos interesa y a ellos tampoco», zanjan fuentes gubernamentales.

El PSE da así por satisfechas sus exigencias para combatir la segregación. También cree que ha logrado que se dé prioridad a la necesidad de que, además del euskera, los estudiantes salgan con mejor dominio «de la ciencia o las matemáticas», sobre todo tras hacerse público el informe del Instituto Vasco de Evaluación e Investigación (IVEI) de 2019 que certifica los peores resultados escolares del alumnado vasco en una década. Ven avances, asimismo, en la necesidad de que los modelos se adapten «en positivo» a la realidad sociolingüística de cada zona y la necesidad de contar con un sistema de evaluación que permita comparase con otras comunidades autónomas.

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