El PSE llama a completar el Estatuto, pero «sin guerrear» contra el Gobierno central

Los socialistas vascos han escogido el palacio de Villa Suso de Vitoria para conmemorar el aniversario de la norma institucional básica de Euskadi, que llega a los 43 años de vida sin haber culminado su catálogo de competencias y sin haber cambiado una coma respecto al texto promulgado en 1979. Para el PSE-EE, en todo caso, el Estatuto de Autonomía tiene el valor de saber «gestionar las identidades». «El verdadero derecho a decidir es eso, poder elegir cada uno su forma de ser», ha ensalzado Andueza, frente al «concepto antiguo y sectario de que cada territorio tiene una sola identidad».

El secretario general ha reivindicado que el suyo es el único partido que ha estado con el Estatuto de Gernika desde el inicio. «Otros o no participaron en su redacción, o no impulsaron su aprobación, o lo abandonaron para emprender otras vías lejos de este pacto de convivencia», ha dicho en referencia al plan Ibarretxe del PNV. «Algunos incluso no hicieron ninguna de las tres cosas», ha añadido en alusión a la izquierda abertzale. Andueza se ha congratulado de que la autonomía «nos ha permitido contar con unos servicios públicos que han respondido a la dureza de las circunstancias».

Noticia Relacionada

Urkullu resucita la exigencia de un Concierto Político y un Poder Judicial propio

OLATZ BARRIUSO

En este sentido, el líder de los socialistas vascos ha incidido en que el autogobierno «no es sólo ni fundamentalmente una suma de competencias arrancadas a la Administración central». Andueza viene censurando la forma en la que el PNV y sus integrantes en el Gobierno vasco gestionan el proceso de traspasos pendientes, hasta el punto de que en septiembre dijo que las competencias en negociación «no son fundamentales ahora» para la sociedad vasca. Un mes después, ha evitado profundizar en esa polémica, que causó indignación incluso entre sus compañeros, pero ha advertido de que el Estatuto «no es moneda de cambio, sino una herramienta de cohesión».

Mirando hacia el futuro, el secretario general del PSE-EE ha dejado la puerta abierta a una reforma estatutaria «que nos permita estar en la vanguardia y que vuelva a ser un pacto de convivencia entre diferentes». Eso sí, ha antepuesto que la ciudadanía vasca «ya no tiene la soberanía entre sus prioridades», por lo que ha llamado a PNV y EH Bildu a olvidarse de «utopías que dividen y fracturan». Para ello se ha servido del ejemplo de Cataluña, donde la ruptura del Govern entre ERC y Junts ha enterrado el 'procés'. «Una vez más ha quedado claro que cuando el diálogo entra por la puerta, el soberanismo sale por la ventana», ha afirmado.