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El lehendakari ha lamentado la mañana de este lunes que los centros de acogida de menores extranjeros no acompañados de Euskadi estén saturados mientras «comunidades ... limítrofes tutelan apenas una decena» de chavales. «No puede ser», ha dicho antes de reclamar al Gobierno central un reparto «equilibrado, solidario y justo» que ayude a descomprimir la presión migratoria. En ese sentido, Imanol Pradales también ha anunciado una alianza con Canarias para exigir la implantación de protocolos en la Conferencia de Presidentes que se celebra el viernes. «Coordinaremos una propuesta por lo que nos une: somos frontera sur y frontera norte».
Ha sido la Diputación de Bizkaia la que ha puesto el foco sobre la llegada masiva de menas al anunciar el mes pasado que ha declarado la situación de «excepcionalidad» ante la saturación de sus centros de acogida. Son actualmente más de 600 chavales los que están siendo tutelados por la institución -se producen tres llegadas al día- y las plazas disponibles son algo más de 400. El Gobierno foral disponía de 16 residencias pero en el nuevo escenario ha abierto nuevos recursos. El matiz es que ya no garantiza que los menores reciban formación socieducativa.
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Nada más tomar posesión Pradales ya advirtió de que la situación se estaba enquistando. Pidió un protocolo de actuación al Gobierno central y contrapuso la situación de Euskadi con la de otras comunidades del entorno -citó entonces concretamente a La Rioja- que, a su juicio, acogen menos chavales de los que deberían. El lehendakari se lo trasladó también a Pedro Sánchez en su encuentro en La Moncloa en noviembre y lo reiteró la consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, Nerea Melgosa, en la Conferencia Sectorial de Infancia celebrada la semana pasada, de la que salió «decepcionada» por la falta de avances en la materia. Se pide un plan de reparto y también financiación concreta.
Hoy el lehendakari ha insistido en la necesidad de articular un «plan estructurado y coordinado», y ha revelado conversaciones con el presidente canario, Fernando Clavijo, para presionar de forma conjunta. Tuvieron un primer contacto durante un encuentro en Bruselas y volverán a encontrarse el jueves, en la previa de la Conferencia de Presidentes de Santander. Pradales también ha advertido de que Euskadi «tiene las competencias que tiene» en materia migratoria y por eso necesita que el Estado ordene la cuestión.
Pradales ha reconocido que la permanente llegada de inmigrantes a Euskadi puede estar generando un «shock» en la sociedad frente al que ha reclamado que «la mejor integración es el trabajo». En ese sentido, ha reivindicado la «necesidad de atraer inmigración» que tiene Euskadi para compensar el declive demográfico. «Se les necesita en multitud de actividades más o menos cualificadas pero si tuviésemos las competencias sería más sencillo». La alusión se refiere al traspaso de la autorización laboral que debe realizar el Gobierno central. «Hay más de 5.000 personas extranjeras formándose en Lanbide sin esa autorización».
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