El PNV presiona a Bildu para que se replantee su manifestación del sábado

Pero los mensajes y llamamientos a la «prudencia» son constantes ante el «riesgo» de que la aglomeración de personas precipite un aumento de los contagios en la capital vizcaína, que acumula una incidencia de 89,5 casos por 100.000 habitantes, lejos aún de la zona roja, marcada en 150. «Es cierto que Bilbao no está en situación de riesgo, pero es muy posible que después de una aglomeración de esas características lo esté la próxima semana. Al final, no es solo la manifestación, sino la gente que se junta antes y después en las calles, los bares...», avisan en el Gobierno vasco.

El más tajante al plantearlo ha sido el burukide de Innovación Política del EBB, el guipuzcoano Xabier Barandiaran, que, en una entrevista en Radio Euskadi, ha pedido a EH Bildu que se «anticipe a la situación» y ha apelado a anteponer la «responsabilidad colectiva» a los derechos individuales o de un grupo determinado. «Cada actor tiene que ser responsable de sus propios procesos y esto no es una tarea solo del Gobierno, sino que tiene que ser compartida y de autorresponsabilidad social», ha advertido Barandiaran, convencido de la necesidad de «prevenir» y evitar situaciones que puedan disparar la curva y perjudicar, en este caso, a todos los bilbaínos. «La libertad sin comunidad no es libertad», ha apostillado el dirigente jeltzale.

El Gobierno vasco comparte la opinión de Barandiaran aunque es consciente de que sus palabras pueden interpretarse no ya como un toque de atención sino como un llamamiento a suspender la marcha del 20-N. Por eso, matizan: «No somos quienes para pedir que se suspenda, es un derecho fundamental. Simplemente apuntamos los riesgos y pedimos a los organizadores que estén alerta». En la misma línea, el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, se ha visto obligado a matizar las palabras de Barandiaran en un tuit en el que deja claro que no tiene «ninguna duda» de que EH Bildu «hará todo lo que tenga que hacer para garantizar que la manifestación del sábado se desarrolle conforme a las directrices vigentes».

La izquierda abertzale ya ha pedido a los asistentes, que en una concentración de estas características pueden ser decenas de miles, que hagan uso de la mascarilla. «El sábado todos con mascarilla a desenmascarar el autoritarismo», animó ayer Arnaldo Otegi. Hoy, el coordinador general de Bildu se ha mostrado más irónico y ha tuiteado un pantallazo de la edición web de 'El Diario Vasco' en el que conviven el llamamiento a la prudencia del Gobierno vasco con la noticia de que las restricciones no afectarán a los aforos de los estadios de fútbol. «Habrá que hacer la mani en Anoeta», comentaba un usuario en un apunte que Otegi ha retuiteado.

La portavoz de EH Bildu en el Parlamento vasco, Maddalen Iriarte, se ha mostrado «sorprendida» por el hecho de que el Gobierno vasco y el PNV solo hablen de la marcha del sábado, y no del congreso del PSE, este fin de semana con la visita estelar de Pedro Sánchez, la asamblea general del PNV en el BEC, el siguiente, o los propios eventos deportivos a los que se refería Otegi. En el Gobierno vasco creen que no es lo mismo un evento controlado en un espacio cerrado, donde se pueden mantener las distancias y los protocolos en todo momento, que una manifestación multitudinaria en la calle con todo lo que conlleva.