En busca de las ánimas vitorianas

Existe el alma y, en tal caso, qué es? La pregunta se la han formulado millones de personas a lo largo de los siglos. Filósofos, teólogos y gente de a pie discutieron y discuten todavía sobre el tema. Y si existe, ¿solo los seres humanos gozan de ella o también la poseen animales, plantas, ciudades? A esta última cuestión tratan de responder durante la visita guiada de clarificador nombre: 'El alma de Vitoria-Gasteiz: Historia, gastronomía y tradición', que puedes reservar hasta diciembre en la web https://kalearte.com. (Hasta diciembre).

Pretende «dar a conocer la capital de Euskadi, algunas de sus tradiciones y anécdotas históricas más curiosas. Hacerlo durante un paseo y en un ambiente distendido, pero con información rigurosa. Diseñado para conocer tanto la urbe como el carácter de su gente. Con vistas impresionantes, como la de la almendra medieval desde el mirador de la torre de San Vicente, en pleno centro urbano», explican los organizadores. Acaba deliciosamente, añadimos, gracias a la degustación de dos pintxos con bebida en uno de los establecimientos hosteleros más emblemáticos de Vitoria-Gasteiz (sorpresa). «Toda una sabrosa experiencia», añaden.

El encuentro con el cicerone se concreta en el exterior de la Oficina de Turismo, situada en la Plaza de España 1. Los viernes y sábados a las 17:00 horas. El recorrido da el pistoletazo de salida en las plazas de la Virgen Blanca y Nueva. Sigue por la cuesta de San Francisco y los arquillos. Y asciende a la torre de la parroquia de San Vicente, abierta exclusivamente para el grupo. «Los participantes conocerán un conjunto monumental alabado por literatos como Víctor Hugo o Eva García Sáez de Urturi», matizan.

Después, toca llegar hasta la plaza de la Burullería y los palacios de Montehermoso y Escoriaza-Esquivel. Y a la plaza del Machete, donde tiene lugar la esperada degustación. En cuanto a los datos prácticos, dura unas dos horas y es gratis para menores de 6 años (sin pintxos en este caso). ¡Aviso importante!: las personas con movilidad reducida no podrán acceder a la torre de San Vicente ya que se sube solo por escaleras.

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