Julio quiere ser alcalde en Álava a los 86 y Ion, a los 24

Entre los mayores de cada partido, hay de todo: cincuentañeros, sexagenarios, septuagenarios y hasta octogenarios. Los dos candidatos más veteranos sólo se llevan dos años entre ellos. El mayor de todo el territorio es Julio Rodríguez. A sus 86 años, lidera la apuesta del PSE para conquistar el Valle de Arana. Un hombre que, aunque ha declinado hablar con este periódico, es definido por quienes lo conocen como «un militante de toda la vida, convencidísimo del partido».

A pesar de su edad, tiene espíritu joven: sale a caminar y le gusta mantenerse en forma. No es raro verle por la sede del partido, a la que acude habitualmente a leer la prensa y a interesarse por las necesidades de los socialistas del territorio. Ahora busca que su formación vuelva, 32 años después, al pleno municipal de su localidad. La última vez que eso ocurrió fue en 1991. De hecho, el último concejal no fue estrictamente socialista, sino de Euskadiko Ezkerra.

En idéntico empeño está Antonio Fernández de Palomares, que aspira a mantener el asiento que el Partido Popular tiene en la corporación de Ribera Alta con 84 años. Nacido en 1938 y amigo de Ana Salazar, secretaria general del PP alavés, explica que «le dije que estaba dispuesto a ir donde hiciera falta en la lista: el primero, el último o fuera». Finalmente lidera la apuesta popular en su municipio. Palomares -así le llaman en las filas del PP- se define a sí mismo como un hombre de consenso. «Da igual quien lleve una propuesta: si es buena para el pueblo voto a favor».

En Ribera Alta, el candidato más veterano del PP se bate el cobre con 'Josepe' Martioda. A sus 71 años es el alcaldable con más experiencia de EH Bildu y cree que es ahora, jubilado, cuando «tengo más tiempo para ayudar» desde la política. Un oficio que entiende que en lo municipal es «casi como la administración de la escalera» y que «debería ser un derecho y una obligación para todos los ciudadanos». A pesar de su edad, Martioda se muestra indignado con el «clientelismo» con el que cree que se gobierna su municipio, para el que pide «atribuciones propias» y que no se gestione «mirando al ABB».

Precisamente del PNV procede la alcaldesa más veterana de Álava: Nati López de Munain. Lleva gobernando Elburgo dos décadas y busca ahora el sexto mandato consecutivo. Hoy sigue en primera línea por el «retorno positivo» que aporta la política local, en la que defiende el «importante cambio» que se le ha dado a Elburgo.

En el lado opuesto de la balanza está Ion García de Olano. A sus 25 años, es el candidato más joven de EH Bildu. En su caso, por Moreda de Álava. El interés por la política le surgió después de ser designado presidente de una mesa electoral con 18 años. «Empecé a preguntar por cómo se gestionaban las cosas del Ayuntamiento y nadie me daba respuestas». A partir de ahí consiguió juntar a ocho amigos más y conformar una primera agrupación que acabó designándole como candidato a la alcaldía.

El alcaldable abertzale cree que su presencia en Bildu «aporta una visión diferente». Entre sus propuestas para los jóvenes del municipio, destinar edificios municipales a la vivienda social y desarrollar «unos festejos más centrados en la juventud».

García de Olano niega haber sufrido discriminación por su juventud. Algo en lo que coincide el segundo candidato más novel del territorio, Daniel García. Con 27 años lidera la apuesta del PP por Labastida, pero lleva ya una legislatura -y una victoria electoral- a sus espaldas.

El popular y el abertzale también concuerdan con Gorka Arguijo, el candidato más joven del PSE, con 27 años y cabeza de lista en Yécora, a la hora de señalar el principal problema de los jóvenes: la vivienda. «En Yécora apenas hay terrenos urbanos libres y hay que pagar un dineral por casas que están en un estado casi de abandono». Larraitz Waliño, candidata jeltzale por el Valle de Arana a sus 27 años, hace hincapié en la otra gran clave para que los jóvenes se queden en los pueblos: «Tiene que haber más oportunidades laborales. Sea en la industria o en el campo», argumenta.

Elkarrekin Podemos es la formación que más ha apostado por candidatos de mediana edad: su candidata más joven es Leticia Jiménez, que aspira a ser alcaldesa de Amurrio con 36 años y el de mayor edad es 'Napi' San Juan, un sindicalista de 52 años que encabeza la lista morada en Alegría-Dulantzi.