La patronal transmite a Urkullu su «preocupación» por el caos en la gestión de las bajas por Covid

La queja de la organización empresarial vasca se ha producido en el transcurso de un encuentro programado por el comité ejecutivo de Confebask con el Gobierno, al que han asistido además del lehendakari la vicelehendakari y responsable de Trabajo, Idoia Mendia y la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia. La reunión forma parte de los encuentros anuales que Confebask mantiene con el Gobierno para hacer un repaso de los asuntos de actualidad.

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Según una nota difundida por la patronal, han «mostrado su preocupación por el alto número de bajas laborales causadas por la sexta ola de la pandemia, así como la necesidad de actuar para tratar de agilizar lo máximo posible el proceso administrativo de altas, por supuesto, siempre que la salud personal en cada uno de los casos y el asesoramiento científico lo avalen». Fuentes de esta organización han señalado a EL CORREO que además de haberse disparado el número de bajas laborales se vive un auténtico desorden en la tramitación de las mismas. La casuística es amplia, apuntan, pero la saturación de los centros de Atención Primaria se sitúa como causa fundamental de esta situación. Junto a ello, añaden, se han registrado también numerosas incidencias informáticas -muy superiores a las habituales-, con bajas que han sido concedidas por los médicos de Osakidetza pero que se han perdido en alguna parte del procedimiento y no figuran en el registro FIE de la Seguridad Social.

Hay que tener en cuenta que la 'baja covid' tiene unas características singulares, ya que el Gobierno central decidió «asimilarla» a la de una enfermedad profesional. Esto es, no es una baja como la que se concede ante una gripe convencional y tiene una trascendencia económica diferente, tanto para el trabajador como para la empresa. En el caso de la 'baja covid' la empresa asume el abono salarial del primer día, pero la mutua afronta el pago de la prestación a partir del segundo día, equivalente al 75% de la base reguladora del salario. En las bajas por enfermedad común, sin embargo, es la empresa la que debe asumir el pago del salario correspondiente durante los cuatro primeros días.

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Por otra parte, los empresarios vascos han reiterado al lehendakari su valoración «positiva» sobre la reforma laboral que la CEOE, organización a la que pertenecen, ha pactado por el Gobierno de Pedro Sánchez y con los sindicatos UGT y CC OO. Un pacto que debe ser ahora ratificado en el Parlamento y que aún está sometido a un cierta incertidumbre, ya que el Gobierno de coalición PSOE-Podemos no tiene garantizado aún el respaldo suficiente para convalidar en Real Decreto con el que la nueva legislación entró en vigor a finales de diciembre. Un encaje en el que puede resultar decisiva la posición del PNV, cuya dirección se muestra reacia a respaldar el texto legal en su actual redacción. Los jeltzales han exigido que se retoque el acuerdo para dar prevalencia en la fijación de salarios y jornada a los convenios autonómicos frente a los nacionales. En un comunicado emitido por el Gobierno vasco tras la reunión se indica que el Ejecutivo «espera que pueda salir adelante con el mayor consenso social y político posible».

Además, el presidente de la patronal vasca, Eduardo Zubiaurre, ha expuesto al lehendakari y al resto de miembros del Gobierno que han asistido al encuentro su visión sobre la coyuntura económica y las perspectivas de cara a este año. Un panorama que observan con optimismo pero también con numerosas incertidumbres, como consecuencia del impacto de los precios de la energía, el aumento generalizado de los precios y también las dificultades logísticas que afectan de forma especial a la industria.