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Una de las consecuencias de la pandemia ha sido la apertura de un nuevo escenario en los métodos de trabajo y en la organización de las tareas en las empresas. El teletrabajo, la digitalización y el empleo de recursos online ha avanzado en apenas unos ... meses lo que estaba previsto hacer en varios años elevando la demanda de servicios de desarrollo informático y software y empujando la facturación de las empresas del sector a niveles récord. Es una corriente que la compañía vasca Ibermática quiere aprovechar para seguir creciendo con un ambicioso plan que prevé elevar un 81% su facturación hasta 2025 alcanzando los 500 millones de euros, incrementar un 25% su plantilla hasta llegar a los 5.000 trabajadores y adquirir hasta 8 nuevas empresas.
De momento, las cifras del pasado 2021 que la compañía participada por Kutxabank presentó este martes ratifican esa senda con un nuevo techo en la facturación que se incrementó un 9% sobre el año anterior alcanzando los 276 millones de euros. Un crecimiento que supera ligeramente el que ha marcado el sector y que se ha situado entre el 6% y el 7%.
Las cifras se han trasladado también al beneficio que creció un 54% hasta alcanzar los 11,3 millones. El principal impulso ha venido de los trabajos realizados en el ámbito de lo que se conoce como 'Soluciones Avanzadas' y que ha crecido un 50% en los últimos tres años. Son tareas que afectan a la transformación digital de las empresas, el desarrollo de servicios en la nube, el desarrollo de robotizaciones en las fábricas, la ciberseguridad o la analítica de datos y la 'Inteligencia Artificial'.
Además, la renovación del 90% de contratos de prestación de servicios ha contribuido a mantener una cartera de pedidos que asciende a 270 millones que, como explicó el consejero delegado, Juan Ignacio Sanz, es un «garantía» para la facturación de los próximos «dos o tres años».
Nuevas compras
Para alcanzar el crecimiento que se ha fijado la empresa será necesario mantener el ritmo de compra de compañías que aglutinar en el grupo Ibermática. El objetivo es adquirir una dos en cada ejercicio. El pasado año, Ibermática compró la empresa especializada en analítica de datos El Arte de Medir (EAM) y para antes de verano se esperar cerrar otra adquisición a la que seguirá otra en otoño. Se trata de buscar empresas consolidadas, pero de pequeño tamaño y que estén especializadas en áreas como la ciberseguridad, la analítica de datos o la 'Inteligencia Artificial'.
Este crecimiento inorgánico pasa por mantener la estructura y personal de las compañías adquiridas y ofrecerles un primer crecimiento con la cartera de clientes de Ibermática. La próxima compra se centrará en una compañía que desarrolle soluciones de 'Salesforce' lo que supondría la primera entrada de Ibermática en el desarrollo de programación del gigante norteamericano.
Falta de perfiles profesionales
Entre los desafíos, la búsqueda de perfiles profesionales es el principal reto en un año en que la compañía prevé incorporar a 300 nuevos trabajadores. Y es que el perfil de ingenieros y especialistas en programación, analítica de datos y ciberseguridad es una asignatura clave del sistema de formación. Para el CEO, Juan Ignacio Sanz, la situación es grave porque «no hay gente suficiente» hasta el punto, señaló, de «que no va haber recursos humanos para desarrollar los proyectos que van a contar con financiación de los fondos europeos».
Sin cambios en el accionariado
Sanz aseguró que, al menos hasta 2024, no se prevén cambios en el accionariado de Ibermática. La compañía sigue controlada por el fondo inversor ProA Capital, que tiene un 65% de las acciones. El gestor de inversiones realizó un traspaso a una herramienta secundaria para mantener la posición en Ibermática hasta cerrar un nuevo ciclo. La ONCE tiene un 15% de la compañía y Kutxabank también mantiene ese mismo porcentaje.
Sobre la participación del banco surgido de las antiguas cajas vascas, el consejero delegado señaló que no esperan movimientos. El accionariado lo completa el equipo directivo con un 5%. Se trata de un reparto que se mantendrá estable por lo menos hasta 2024. En ese año el cierre del ciclo inversor de ProA puede generar la entrada de un nuevo socio o modificaciones. En cualquier caso, Sanz no cree que sea un problema dada la situación de la empresa y su situación financiera. Lo que sí descartó en cualquier caso es una salida a Bolsa.
Ibermática es una empresa que se ha hecho fuerte en la prestación de servicios de desarrollo de software a grandes empresas, principalmente la administración pública. En este sentido, ha pasado de jugar un papel importante en la administración vasca, donde ha desarrollado proyectos como el de la receta electrónica de Osakidetza o aplicaciones para el desarrollo de TikectBai en las haciendas forales. Actualmente cuenta con 27 oficinas, cuatro de ellas en Gipuzkoa, dos en Madrid, Álava y Bizkaia, y una en Asturias, Badajoz, Barcelona, Navarra, Sevilla, Valencia y Zaragoza. También cuenta con dos sedes operativas en Portugal y 1 en Andorra, Argentina, Brasil, Chile, EE UU, México, Perú, y Reino Unido.
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