Las instituciones vascas se felicitan por el preacuerdo del sector del metal alcanzado en Bizkaia

Por su parte, el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, ha celebrado también el preacuerdo y ha esperado que «el sindicato que se ha quedado fuera», en relación a ELA, «reflexione y se sume». Durante su intervención en el pleno de las Juntas Generales de Bizkaia, ha señalado que es un «reto obligado» que «el empleo tiene que ser de más calidad y estable» y, en este sentido, ha indicado que «corresponde a esta sociedad, poniendo a las administraciones por delante, pero también a las empresas, trabajadores y sindicatos que lleguen a acuerdos para mejorar las condiciones y la calidad del empleo». Además, ha añadido que la Diputación está poniendo su «grano de arena con las cláusulas sociales en la administración pública, además de nuestras OPE».

Estas han sido las reacciones institucionales al fin al conflicto del metal de Bizkaia, el principal sector económico de Euskadi, con más de 50.000 trabajadores. Tras veinte meses de negociaciones y una treintena de reuniones, anoche la patronal Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM) y tres de los cuatro sindicatos del sector, CC OO, LAB y UGT, llegaron a un acuerdo del que ha quedado al margen la central mayoritaria, ELA.

Esto implica la desconvocatoria de de los diez días de huelga convocados, cuyas primeras jornadas iban a tener lugar este jueves y viernes, 28 y 29 de noviembre. El principio de acuerdo alcanzado hoy por sindicatos y patronal en el CRL (Consejo de Relaciones Laborales) tendrá una vigencia de tres años, estará vigente con efectos retroactivos al 1 de enero de 2019 y finalizará en diciembre de 2021. El pacto incluye la ultraactividad indefinida del convenio.

La FVEM manifiesta que la consecución del acuerdo ha sido la culminación de «un proceso coherente en que ambas partes han cedido», por tanto que se ha logrado «el mejor acuerdo posible para el sector» y que ahora la preocupación de todos ha de ser «trabajar para que el sector siga creciendo».

Desde el sindicato ELA recalcan que las movilizaciones han sido las que han hecho modificar su «postura inmovilista» a la patronal, al tiempo especifican que en los próximos días analizarán el acuerdo llegado por el resto de los sindicatos y «decidiremos los próximos pasos a dar».

El texto pactado tendrá que ser ratificado por los órganos de la FVEM y de los sindicatos UGT, CC OO y LAB en los próximos días, por lo que se prevé que la firma definitiva del convenio se materializará el próximo lunes por la tarde.

Desde CC OO agradecen a los trabajadores del Metal de Bizkaia su «implicación en el logro de un nuevo triunfo de la lucha de la clase trabajadora» y recalcan que «hoy se ha vuelto a demostrar que el binomio movilización-negociación» da resultados». Asegura que este nuevo convenio «beneficiará al conjunto de la clase trabajadora del sector».

La valoración de UGT es totalmente positiva porque desaparece «la doble escala salarial que se venía dando con dos convenios en vigencia, uno del 2003 y otro del 2011», además de que permite la «recuperación económica en referencia a lo perdido en tablas salariales durante estos 8 años».

Por su parte, el sindicato LAB califica el pacto sellado hoy como un «preacuerdo histórico», en el que ha sido fundamental la unidad sindical, por lo que queda demostrado a su entender que «la lucha es el único camino para defender los derechos y mejorar las condiciones laborales».

El actual marco laboral del Metal de Bizkaia presentaba una laberíntica situación en las relaciones laborales, ya que el último aprobado y ya decaído para el periodo 2008-2011 era de eficacia limitada, al haber sido respaldado sólo por UGT y CC OO; por lo que parte de los trabajadores tenían referenciadas sus condiciones salariales y laborales en el convenio general de 2003.

El nuevo convenio 2019-2021 fija incrementos salariales con una actualización sobre tablas del IPC + 2,50% para el año 2018 (actualizado a tablas). Para el 2019, IPC del 2018 + 1,75% , para el 2020 el IPC del 2019 +1,50% y para 2021 el IPC del 2020 + 1,50%. El convenio contempla garantías para los salarios reales.

Otro punto fundamental en este convenio es la subrogación, que hasta ahora se había aceptado para las empresas públicas, ahora se incluye también a las privadas siempre que correspondan a servicios de mantenimiento permanentes. Esto implica que los trabajadores tendrán derecho a pasar a la nueva adjudicataria, subrogándose en las mismas condiciones salariales y laborales que venían teniendo. De esta manera, según los sindicatos, «se da estabilidad en el empleo, evitando la temporalidad y los bajos salarios, cerrando las puertas a las empresas multiservicio».

El tema de la subrogación tiene mucha transcendencia porque además afectará a las grandes empresas que tengan su propio convenio.

Los sindicatos indican que también han conseguido mantener y consolidar el complemento de incapacidad temporal para los accidentes laborales y enfermedades profesionales establecidos en el convenio de 2008-2011

La parte sindical ha aceptado que no se incluyan nuevas limitaciones a la contratación por medio de ETT y también que se eleve en una jornada la flexibilidad -pasar de 4 ó 5 sáías de flexibilidad a 5 o 6 días-, pero para ello las empresas tienen que cumplir una serie de requisitos y porcentajes de trabajadores fijos.