Así vivió Verdeliss el maratón nocturno de Bilbao: su triunfo paso a paso y en primera persona

Verdeliss continúa de resaca emocional tras su triunfo en categoría femenina absoluta en el maratón nocturno de Bilbao. Estefanía Unzu, como así se llama esta atleta e influencer navarra que es madre de 8 hijos, vivió una gran noche y celebró la victoria a lo grande. Se trataba de una cita muy esperada en su calendario. Tras hacerse muy conocida por su faceta como madre en Instagram y participar en 'Gran Hermano Vip 6', tras la pandemia, se propuso retomar el atletismo y este triunfo viene a redondear un año lleno de éxitos.

Por eso, se preparó a conciencia y entrenó duro para la Bilbao Night Marathon. La deportista ha compartido con su casi millón y medio de seguidores cómo vivió las horas previas a la prueba y sus grabaciones durante el recorrido, que completó en 2.55.33, a 17 segundos de la mejor marca que había establecido en Logroño.

La jornada del sábado para Verdeliss arrancó en su casa de tres plantas ubicada a las afueras de la ciudad de Pamplona. Allí vive con su marido el abogado Aritz Seminario y sus 8 hijos, cuyas edades oscilan entre los 18 y los 2 años. Nada más levantarse, recibió el abrazo de una de sus pequeñas. Lo mejor para encarar un día importante en su carrera como atleta. A las 13.00 horas, la comida: una ración de macarrones y, después, sus suplementos.

Una hora después, toca vestirse y con atuendo deportivo se desplaza a Bilbao. Acompañada por varios de sus hijos y su esposo, se dirigen al Palacio Euskalduna, donde se reunieron los participantes de la carrera. Recogida de dorsal -portaba el número 10- y últimos ánimos. Después, todos a la explanada de San Mamés, de donde partía la prueba. A las 19.00 horas, se grabó a sí misma en su salida.

«Brutal la animación de Bilbao», dice mientras corre por el puente de Deusto, esta vez ya filmada por su marido, quien no para de insuflarle ánimos. «Venga Estefi ¿Cómo vas? Venga mi amor, muy bien. ¡Campeona! ¡Vamos a tope, venga mi vida!». A su llegada al Guggenheim vuelve a coger el móvil: «10 kilómetros a un ritmo de 3.54. ¡De momento primera femenina!».

Las sensaciones eran muy buenas y en hora y 25 minutos completa la media maratón. Los aplausos desde el público eran ensordecedores. «Ha sido como correr en casa. Gracias, Bilbao. No lo olvidaré jamás».

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