Metadona para el mono

Análisis ·
Los yonquis del deporte que contamos los años por temporadas reponemos ahora partidos históricos y duelos enlatados

Ángel Resa

Martes, 17 de marzo 2020, 02:10

Vivimos tiempos de anormalidad, de miedo e incertidumbre, ese temor ancestral a lo incontrolado. Resulta muy difícil encontrar aspectos favorables en una situación de emergencia mundial -mucho más allá de los reinos de taifas, por cierto-, pero quizá de ésta aprendamos algo. De forma inmediata, ... la posibilidad de detenernos a pensar un rato. Y cuando salgamos del túnel donde se enturbia la salud colectiva que afecta a personas individuales, tal vez asimilemos lecciones que logren nuestro crecimiento como sociedad. Espero que el párrafo no haya quedado como un mitin o una homilía y sirva, siquiera una micra, para que todos y cada una entendamos los retos globales.

Los aficionados al deporte contamos los años por temporadas. Según nuestros calendarios, las fechas concretas desvelan acontecimientos fijos. De ahí que con el fundido a negro de todas las competiciones -ya le costó al golf suspender el 'The Players' después de disputarse la primera jornada ante público en directo- degenere en síndrome de abstinencia para los enganchados al 'sillón ball' sin remedio. Palpándose la ropa y a falta de 'mercancía', ahora los toxicómanos de los deportes televisados miran con hostilidad la pantalla y la encienden con el mando a distancia en busca de su metadona. Hora de recuperar partidos históricos y abrir la lata de modalidades que se mantenían en conserva porque el rápido paso del tiempo las confinaba al desván de los acontecimientos olvidados.

Buenas fechas para reeditar aquellos litigios cabales entre los Celtics de Larry Bird y los Lakers de Magic Jonhson o el baloncesto-catch de los Pistons. De tratar de entender la progresiva degradación de Maradona entre aquel pibe majestuoso que asombraba con su talento inabarcable en un fútbol violento de caza mayor y el actual guiñol de sí mismo. De revisar los duelos legendarios que enfrentaban a Rafa Nadal y Roger Federer. (Perdón, que estos dos siguen jugando y muy bien aunque el reloj suizo se ha parado por un tiempo). O ya, si eso, a los nostálgicos del motor les cabe la opción de degustar de nuevo los títulos de Fernando Alonso a los mandos del Renault. Cualquier 'sucedáneo' sin cafeína, falto de alcohol o rebajado de nicotina que aplaque el mono.

En cualquier momento pone uno Eurosport y fija los ojos en las carambolas estudiadas del 'snooker' o mira en Teledeporte el atletismo del que sólo repara durante los Juegos Olímpicos. A este paso, y recordando aquella vida de enviado especial, acabaré por no quitar la vista de las carreras de camiones en la tele del hotel.

Tiempo de redescubrimientos. O quizá sin el prefijo 're' en algunos casos. Reclusiones domiciliarias que tal vez desempolven libros de las estanterías, películas añejas, tantas series por meterse para las entrañas que necesitaríamos varios confinamientos seguidos… Y, sobre todo, el hallazgo de esos canales temáticos que inducen a poner orden en casa de una vez y -ahora sí- sin excusas que valgan. Mientras escribo esto Urkullu anuncia el aplazamiento de los comicios vascos. Pasamos de sortear la quiniela a ni siquiera poder apostar a los resultados electorales. Así que calma, paciencia, solidaridad, lectura y revisiones de clásicos.