Un impacto de 37 millones, récord de espectadores y televisado a 115 países

El estudio detallaba que el 91% de los turistas que visitaron Bilbao, durante los días 11 y 12 de mayo de 2018 para presenciar las finales de rugby, recomendarían Euskadi como destino de vacaciones en sus países de procedencia. 50.503 asistentes procedían de fuera de Euskadi, originarios de 50 países diferentes.

Con estos datos, Bilbao se posiciona como la segunda sede con mayor acogida en la historia de la Challenge Cup, con 32.543 espectadores en San Mamés, sólo superada por Marsella, en la final del 2010. En 2017, Edimburgo recibió 24.500 personas para presenciar la Challenge y fue, en aquel momento, la ciudad que logró una mayor entrada fuera de Francia. Con respecto a la Champions Cup, San Mamés registró un lleno absoluto con 52.282 espectadores, récord de asistencia que se mantiene aún en vigor. El Athletic ha llegado reunir a 51.544 en el partido de vuelta de Copa del Rey ante Osasuna en 2023.

En total, las dos finales pudieron verse por televisión en 115 países de todo el mundo, 225 periodistas acreditados siguieron las finales en el mismo estadio de San Mamés y y se tramitaron un total de 500 solicitudes de acreditación para medios de comunicación de Irlanda, Reino Unido, Francia, Italia, Argentina, Ucrania, Rusia y Turquía, entre otros. Además unas 1.170 personas llegaron a Bilbao como asistentes oficiales a las finales de rugby, entre jugadores y miembros de los equipos finalistas, equipo de la European Proffesional Club Rugby (EPCR), organización, sponsors, medios de comunicación, personal contratado específicamente para el evento y voluntariado.

«El éxito que han tenido estas finales de rugby, con la gran implicación de las tres instituciones vascas, demuestra que Bilbao es un referente, por sus infraestructuras, su calidad de servicios y su saber hacer. Desde luego estamos preparados para afrontar este 2018 y para seguir trabajando en nuevos retos de cara a futuro», se felicitó en su día el alcalde, Juan Mari Aburto.

Desde el Gobierno vasco mostraron el mismo entusiasmo ante el éxito organizativo en las finales de rugby. El consejero de Cultura, Bingen Zupiria, destacó que «queda patente una capacidad de organización cada vez mayor». Y, sobre todo, la cita deportiva «nos ha permitido proyectar al mundo la nueva imagen de Euskadi, la de un país avanzado, cohesionado e interesado en la cultura y el deporte». Desde la entidad foral se mostraron convencidos de que los foráneos se llevan «la mejor imagen de Bizkaia: una sociedad acogedora, orgullosa de sus raíces, moderna y dotada de infraestructuras de calidad».