Status Quo pone el ritmo en Bilbao

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Iñaki Esteban

Tras una tarde en la que destacó sobremanera Maika Makovski, los Status, sin apretar el acelerador pero a una velocidad de crucero superior a la de los Rolling Stones, impusieron su leyenda a base de canciones en la primera jornada del BBK Bilbao Music Legends Fest, estreno además del pabellón de Miribilla como sede del festival. El lugar del rubio Rick Parfitt, el otro cofundador del grupo fallecido a los 68 años en Marbella en la Nochebuena de 2016 por un ataque al corazón, lo ocupa desde 2017 el irlandés Richie Malone, con quien el jefazo Francis Rossi, de 73 años, no mantiene tanta interacción en escena, pero sí la suficiente.

Bueno, la interacción ya la aportó el público, predispuesto, transversal, más roquero que el de Fito y no tan nostálgico, aunque Francis dijera que está viejo y que mira el setlist para no equivocarse y que luego lo escriban por ahí, je, je... Además, en la otra referencia a la edad, dijo que por el lado del tablado donde actuaban el guitarrista y el baterista estaban los 'babies', los 'bambinos', los benjamines.

Con los cinco miembros ataviados con camisas blancas (al principio el líder vistió un chaleco como signo de distinción), los Status operaron como un grupo, tanto que cuatro de ellos cantaron. Además de Francis Rossi, lo hicieron Malone, Rhino Edwards –bajista desde 1986– y Andy Brown –teclista desde 1976–. El único que no cantó pero sí coreó fue Leon Cave, baterista desde 2013.

Y de tal guisa, exhibiendo un ansia de profesionales que aún disfrutan con el rock and roll y el boogie que emiten, Status Quo pusieron la máquina a rodar y entre la velocidad de crucero movedora (y hasta conmovedora) del repertorio en general, se podrían señalar muchos temas de los 16 que ejecutaron: la tensión que se mascaba desde el arranque de 'Caroline' (la peña coreando y con los móviles filmando); el rocanrol entonado por Malone 'Little Lady'; un 'Softer Ride' donde el sonido del pabellón ya se asentó y donde Francis dijo 'hola' a cada lado del aforo milenario; la progresividad brillante de 'Beginning of the End'; los saltos espontáneos del público en la muy Toy Dolls 'Hold You Back'; el popurrí abierto por el inoxidable 'What You're Proposing'; una canción reciente y con mucho gancho como 'Cut Me Some Slack' (mejores que los Rolling Stones, sí); y la balada 'In the Army Now', donde el público coreó e imitó hasta los arreglos del baterista (hace diez años, en 2012, en el Azkena Rock Festival, a nuestro lado la cantaron emocionados una pandilla de espectadores rusos).

Quizá la cima de su bolazo fue anoche 'Roll Over Lay Down' (un boogie subiendo y bajando con el público a su merced y fans como Pato haciendo air guitar, como si tocara una guitarra imaginaria), más móviles en la sesgada 'Whatever You Want', la fiesta absoluta de 'Rockin' All Over the World' de John Fogerty (más famosa por los Status), y un bis que casi no se concede y que fue un 'Paper Plane' en el que los cinco ingleses rebosaron actitud, blues, dinamismo y ritmo inagotable. Y, oigan, cómo mola ver el logotipo de EL CORREO apoyando un concierto de los Status.