Rammstein aparta de la banda a la 'conseguidora' rusa de fans para su cantante

Isabel Ibáñez

Miércoles, 7 de junio 2023 | Actualizado 08/06/2023 11:49h.

Comenta

La banda Rammstein afronta una complicada semana, entre las crecientes acusaciones de violencia sexual y abuso de poder contra su líder, Till Lindemann, y los cuatro macroconciertos que ofrece en Munich desde este miércoles y al domingo ante un total de 240.000 personas. Acaba de saberse que el grupo ha expulsado a su directora de casting, la rusa de 35 años Alena Makeeva, a la que muchas de las fans que han denunciado a Lindemann señalan como la conseguidora que atraía a las jóvenes y las obsequiaba para ofrecérselas al cantante. El periódico alemán 'Bild' recoge el testimonio de la influencer Kayla Shyx, que cuenta con 760.000 seguidores en YouTube y 800.000 fans en Instagram, quien en un vídeo de 37 minutos (visto un millón de veces en solo 24 horas) desvela su experiencia tras ser captada por Makeeva: «De repente me di cuenta de que estaba allí como un objeto sexual», dice. Su testimonio refrenda el de la docena de mujeres que afirman haber sufrido abusos sexuales e incluso violaciones por parte del vocalista.

Shyx relata un incidente ocurrido en el concierto de Rammstein el 4 de junio de 2022 en el Estadio Olímpico de Berlín. Siempre según su versión, Makeeva invitó a ella y su amiga a una fiesta posterior al espectáculo y aceptaron. Pero en lugar de ir a este evento oficial donde había muchos famosos alemanes, tanto ella como su amiga y otras chicas fueron conducidas a una habitación con dos sofás de cuero y una nevera, después de haber entregado sus teléfonos móviles. «De repente, algo en mí hizo clic y me di cuenta: esto no es bueno en absoluto. Y entré en un estado de ansiedad». Asegura que el ambiente era «espeluznante«, con ocho chicas sentadas en los sofás que parecían aturdidas, como drogadas, con la vista perdida.

Noticia Relacionada

El líder de Rammstein, acorralado por una oleada de denuncias de violencia sexual

La influencer dice haber entrado literalmente en pánico cuando otra joven le comentó que Lindemann ya había elegido las mujeres para la fiesta detrás del escenario antes del concierto y para sexo oral durante el descanso del mismo. Shys se sorprendió de que para algunas de ellas aquello era normal: «Yo insistí en que nadie me había dicho que iba a ser parte de una posible orgía, solo que estaba invitada a la habitual fiesta tras el concierto. Hasta ese momento estaba convencida de que estaba allí para eso y de repente comprobé que estaba allí como un objeto sexual».

En ese punto, la influencer y su amiga decidieron marcharse, lo que, asegura, enfadó a Makeeva, quien trató de convencerlas para que se quedaran y bebieran alcohol: «¡Me miró de una forma aterradora! Como si de repente fuera una persona diferente». La joven asegura que quiso contar todo esto cuando sucedió, pero que su entorno se lo desaconsejó y que ahora, tras las denuncias, comprendía que tenía que hacerlo. Aun así, explicó al 'Bild' que ante la repercusión de todo esto, quería alejarse un tiempo de las redes sociales: «Durante los próximos días me retiraré un poco porque la situación es muy estresante para mí, y la presión pública, muy, muy grande».

Ampliar

El caso ocupa los titulares de todos los medios de comunicación alemanes y de medio mundo. La editorial Kiepenheuer & Witsch, que edita libros de poemas escritos por el cantante, ha cancelado su colaboración con él a través de un comunicado que, al parecer, alude a otras razones, aunque relacionadas con este asunto: «Tuvimos conocimiento de un vídeo porno en el que Till Lindemann celebra la violencia sexual contra las mujeres y de que en el libro 'In Quiet Night', que publicamos en 2013, este tema juega un papel importante. Vemos esto como un grave abuso de confianza y un acto imprudente contra los valores que representamos como editor. Defendemos la libertad del arte con plena convicción. Pero a través de las acciones de Lindemann que humillan a las mujeres en el mencionado vídeo y el uso dirigido de nuestro libro en un contexto pornográfico, la separación entre el 'yo lírico' y el autor/artista, que tan firmemente defendíamos, ha sido burlada por el propio autor. Desde nuestro punto de vista, Lindemann supera los límites inamovibles en el trato a las mujeres. Por lo tanto, hemos decidido poner fin a nuestra colaboración con efecto inmediato, ya que nuestra relación de confianza con el autor se ha roto irremediablemente«.

En cuanto a la denominada 'zona o fila cero', muchas de las chicas eran invitadas a ocupar esa zona entre el escenario y las barreras, al parecer para que Lindemann pudiera verlas, y muchas recibían drogas y alcohol; según algunas denunciantes, incluso fueron drogadas sin su consentimiento. En este sentido, partidos como Los Verdes, La Izquierda y la Lista Rosa, entre otros, instan a eliminarla, mientras que el Gobierno alemán quiere controlar la seguridad de las fans en los grandes conciertos, especialmente durante los cuatro que Rammnstein empieza a ofrecer desde esta noche y hasta el domingo en Munich.

El 'Bild' ha hecho una encuesta entre sus lectores que arroja que la mitad de los preguntados creen que el grupo debería cancelar la gira, y de hecho en muchas ciudades, los fans están tratando de revender las entradas para sus conciertos. Así se expresa un fan en Twitter: «He decidido vender mis entradas para Berlín. Lo hago con pesar porque me encantaba su música, pero no apoyaré un sistema de sexismo y abusos». Otra seguidora tiene dudas de que alguien quiera comprárselas, debido a lo elevado del precio y a lo sucedido: «No voy a poder disfrutar del concierto, pero me temo que algunos fans se están solidarizando con un perpetrador». Se refiere al hecho de que en redes sociales está corriendo una petición de los fans más incondicionales para que cuando acabe el concierto de esta noche todos se arrodillen y coreen una canción de apoyo a la banda.