Otro día «de locos» en Loiu: «He vuelto de vacaciones, pero mi maleta no»

Durante toda la mañana se han formado en 'La Paloma' largas, larguísimas colas en los mostradores de las compañías a las que presta servicio Iberia en el trabajo de facturación, embarque y traslado de pasajeros a los aviones. Además de esta compañía, en Bilbao son Vueling, Lufthansa, Turkish Airlines, WizzAir, SwissAir, Aer Lingus y Transavia. En los dos primeros días de huelga se han visto afectados 35 vuelos y 5.000 pasajeros. Las compañías aseguran que han reubicado a más del 90% de los viajeros afectados.

Este sábado se han vivido algunos momentos de tensión en la terminal vizcaína. Mientras por megafonía se escuchaba la última llamada para que los pasajeros del vuelo de las 12:05 a Ibiza embarcasen «con urgencia», María Oñate y Pablo González aún estaban en la fila. «Llevamos más de dos horas aquí, hay una cola tremenda. El vuelo sale ya y todavía no sabemos si vamos a poder subir al avión ni qué va a pasar con las maletas», se lamentaba la primera. «El equipaje se queda en tierra, seguro», le contestaba el segundo.

Los trabajadores de Vueling pedían calma y comprensión, pero los nervios estaban a flor de piel. «No nos dan información ni soluciones», se quejaban varios pasajeros a este periódico. «Es indignante, de locos», resumía Ángeles Vara. «Podrían haberlo organizado mejor, teniendo en cuenta que son circunstancias excepcionales».

Que algo no iba bien lo demostraban las aglomeraciones de usuarios frente a los mostradores. Pero lo 'gordo' ha sucedido de puertas adentro. En concreto, al final de las cintas de equipaje. Los trabajadores en huelga no recogían las maletas que sus compañeros de facturación enviaban a las entrañas del aeropuerto, por lo que el equipaje se quedaba dando vueltas hasta que ya no cabían más.

«Nos han dicho que la cinta está colapsada y que tenemos que dejar nuestras maletas aquí, junto al mostrador, sin vigilancia ni nada», relataba María Gómez. Esta joven veinteañera ha regresado a Valencia, ciudad en la que estudia la carrera, tras el periodo navideño. «He vuelto de vacaciones, pero mi maleta no. Me han dicho que me la mandarán en los próximos días. He tenido que rellenar un papel donde he apuntado mi dirección para que me la envíen ahí. Pero ahora estoy sin ropa», lamentaba.

Ésta era la principal preocupación ayer entre los pasajeros. Qué pasa con su equipaje. El viernes, durante el primer día de huelga, quince vuelos partieron desde Loiu con la bodega vacía, lo que obligó a Iberia a transportar por carretera las maletas hasta Madrid para distribuirlas desde Barajas. Las compañías afectadas aseguran que «se intentará devolver el equipaje de la manera más rápida a los clientes».

Otro aspecto que causó malestar entre los usuarios fueron los retrasos. Numerosos vuelos despegaron más tarde de lo previsto; el número aumentó a medida que avanzaba la jornada, ya que los aviones no llegaban a tiempo para realizar sus correspondientes rotaciones. Esto provocó, en última instancia, algunas cancelaciones. Por ejemplo, en el vuelo de mediodía a Barcelona o el que a media tarde debía haber salido a París. Se espera que la tónica a lo largo del día de hoy sea similar. En cualquier caso, la cifra de vuelos afectados fue ayer menor que el día previo, cuando Bilbao fue, junto a Barcelona, el aeropuerto español con más retrasos.

Muchos viajeros se preguntaban qué pueden hacer para solucionar su situación. Lo primero que recomiendan las compañías es que traten de realizar el 'check-in' por Internet con antelación. Una usuaria mostró ayer a este periódico cómo trataba de obtener la tarjeta de embarque a través de la 'app' de Vueling pocos minutos antes de que saliese su vuelo, pero la plataforma sólo le daba la opción de «cambiar de vuelo».

Por tanto, se pide previsión. Además, la inmensa mayoría de pasajeros cuyos vuelos ya han sido suspendidos (hoy son 15) ya han sido reubicados. Respecto a aquellos que, por cualquier circunstancia, se queden en tierra a lo largo de las jornadas de huelga, la empresa asegura que tratará de reubicarlos en otros aviones del día. Si tuvieran que hacer noche en Bilbao, Vueling asegura que abonará «hotel y gastos».