Propuestas para hacer ciudad

Tras el huracán 'Harvey', se han publicado estudios en Estados Unidos que revelan que un dólar invertido en prevención equivale a 15 en medidas paliativas tras el desastre. Pero la población sigue premiando electoralmente el gasto en tareas de socorro. Según el planificador urbano Juan Alayo, esta reflexión podría trasladarse a Zorrozaurre, cuya transformación en una isla persigue capear una gran riada. La apertura del canal cuesta 10 millones, pero ¿será capaz de dar abasto con una inundación histórica?

Alayo defiende el proyecto para construir un colector colosal entre La Peña y Olabeaga con una tubería de 40 metros de diámetro para encauzar una riada de proporciones brutales, como la de 1983. Bilbao ha extendido la superficie asfaltada -ocupa más del 40%-, lo que dificulta la absorción natural de la lluvia. El director de Urbanismo, Mikel Ocio, recuerda que la Agencia del Agua recomendó la isla, pero admite que «no hay que perder de vista el gran túnel de evacuación», de 200 millones de coste.

El Ensanche ofrece 3 millones de metros cuadrados de vivienda que «han envejecido junto a sus dueños» y presentan altas tasas de desocupación. Son un activo «claramente infrautilizado» cuyo valor rondaría los 9.000 millones, a 3.000 euros el m2. Para sacarle provecho, Alayo propone flexibilizar el PGOU para que permita la segregación de pisos y hacer dos o tres de uno. Ocio le replica que no es tan fácil. Cualquier división debe garantizar la habitabilidad para que haya huecos a la calle y que un dormitorio no quede encima o debajo de baños y cocinas.

La llegada soterrada del Tren de Alta Velocidad a la estación de Abando va a desencadenar una importante operación de cirugía urbana. Tendrá un fin social al cerrar la trinchera que separa la parte vieja y la nueva de la ciudad, pero los proyectos que han trascendido hasta ahora revelan un «excesivo» impacto de las viviendas sobre los equipamientos y los espacios verdes. Según las primeras estimaciones del Ayuntamiento, se podrían levantar entre 887 y 1.370 pisos, éstos últimos agrupados en altas torres.

«Se plantea como una operación inmobiliaria. Tendría que ser otra cosa, más ligera, teniendo en cuenta que es una bisagra entre dos mundos y semilla del futuro de Bilbao. Hace falta algo especial, con un sentido, y no sólo ocho bloques», señala Alayo.

La arquitecta Andrea Traspaderne, por su parte, pide poner coto a las recalificaciones: «Llevamos años sufriendo un proceso imparable de pérdida y conversión de edificios destinados a equipamientos, casi siempre públicos, en viviendas y hoteles».

El vivero de empresas 'As Fabrik', previsto en una vieja fábrica de tornillos de Zorrozaurre, constituye el referente en la apuesta por la nueva industria, el conocimiento y el talento universitario. Aunque su inversión es de 5,8 millones de euros, un 80% de ellos aportados en subvenciones de la Comisión Europea, lo importante es la idea de fondo. El proyecto podría extenderse en otra escala a los barrios altos de Bilbao como una especie de revulsivo, en opinión del filósofo Roberto San Salvador del Valle y del sociólogo Jon Leonardo. «Necesitamos otros 'As Fabrik' para que nos vieran como una ciudad de servicios avanzados», destaca el primero.

Serían fábricas de creación cultural asociadas a la economía y las tecnologías. Leonardo aboga por crearlas en edificios en desuso, lo que daría un impulso a la restauración de algunos inmuebles. «La idea es abrir zonas de actividad para los jóvenes y que la innovación se integre en su cultura».

El Gran Bilbao atesora joyas de la época del hierro, el carbón y la actividad portuaria, algunas de ellas concentradas en un evidente estado de deterioro en Punta Zorroza en lo que los expertos llaman la 'milla de oro' del patrimonio industrial. El director de la cátedra Deusto Cities, Roberto San Salvador del Valle, plantea explotar esta memoria de la actividad económica como la alemana cuenca del Ruhr, visitada al año por más de cien mil personas.

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