Mumbrú entrenará al Valencia

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Robert Basic

En su acto de despedida de Bilbao, emotivo y pasado por lágrimas, Mumbrú aseguró que había llegado el momento de hacer las maletas y probar suerte lejos de casa. «Siempre seré un bilbaíno más», dijo con voz entrecortada ayudándose de un botellín de agua para pasar el mal trago. En aquella comparecencia, en la que estuvo acompañado por su familia, amigos y trabajadores del club, aseguró que no tenía nada hecho con nadie pero que, lógicamente, estaba en conversaciones con otros equipos. Uno de ellos, tal y como ha ido informando este periódico, era el Valencia, aunque el Gran Canaria también estaba interesado en el catalán. Pero el poderoso proyecto del conjunto naranja ha seducido al barcelonés, quien encima ha firmado un contrato de larga duración.

Tras unos días de reuniones y reflexión, en los que también se apostaba por Pedro Martínez como sucesor de Peñarroya -algunos medios lo dieron por hecho-, el club valenciano ha anunciado la contratación del extécnico de los hombres de negro. Lo ha hecho en un extenso comunicado en el que repasa la trayectoria del catalán y que empieza así: «El Valencia Basket ha alcanzado un acuerdo para que Álex Mumbrú (Barcelona, 12/06/1979, 43 años) se convierta en el entrenador jefe de la primera plantilla masculina de la entidad taronja, con una vinculación que unirá a las dos partes para las tres próximas temporadas, hasta el 30 de junio de 2025». Firmar un compromiso por tres temporadas solo demuestra la confianza que tiene el conjunto naranja en el catalán, quien aterriza en una plaza complicada y exigente. Se le pedirán resultados inmediatos y acordes con la plantilla, en la que se trabaja con ambición para convertirla en un aspirante a todo.

En su carta de presentación, el Valencia ha glosado la carrera de Mumbrú como jugador y entrenador. En este sentido, ha destacado su gran labor al frente de la franquicia de Miribilla. Un ascenso en el primer año en la LEB, clasificación para los play-off, una salvación milagrosa y una última temporada en la que el Surne se quedó a una canasta de la lucha por el título. Ahora, el barcelonés disfrutará de una experiencia que ha buscado para dar un empujón a su carrera y lo hará en un equipo poderoso en el que deberá volar alto.