Quinto fichaje

El Baskonia ficha hasta 2025 a Chima Moneke, el carisma en la pintura

El conjunto azulgrana cambia la elegancia y la amenaza ofensiva de Daulton Hommes por la exuberancia física y energía de Moneke. Un interior que suple su falta de centímetros a base fuerza, fibra y una capacidad atlética que le convierte en un gran defensor. En ataque, sabe aprovechar su velocidad para generar espacios y tiene instinto reboteador y el carisma por bandera.

El nigeriano es de esos jugadores capaces de fijarse como objetivo alcanzar la Final Four. Hambriento y ambicioso, tiene una marca de ropa con el lema «I'm a nobody and Nobody's Perfect» (Soy nadie y nadie es perfecto). Su conexión con la afición es inmediata. Puro carisma. «El baloncesto para mí es un juego, una diversión, y yo prometo show», proclamó tras su fichaje en el Orléans francés.

Así lo demostró en Manresa en la temporada 2021-2022, la campaña de su eclosión. MVP de la Basketball Champions League y segundo mejor jugador de la ACB sólo superado por Musa. Promedió 14,8 puntos (el sexto máximo anotador de la ACB), 8,4 rebotes (el segundo mejor), 20,9 de valoración (tras Musa y Shermadini) y 1,7 recuperaciones. Su única laguna, el 29% en triples, un lunar para un Baskonia que apunta a volver a jugar rápido y divertido, pero con mayor presencia del juego en el poste bajo.

«En verano entreno con Embiid y Tatum y puedo defenderles», aseguró en abril de 2022 en una entrevista con este periódico. «Mi intensidad defensiva es única. Así que siento que puedo ser un buen jugador allí», dijo pleno de autoconfianza. No se equivocaba.

Su año a las órdenes de Pedro Martínez propulsó a Moneke hasta la NBA. Los Sacramento Kings le hicieron un hueco con un contrato dual en el que solo jugó dos partidos con el primer equipo. «Con diez minutos me vale para poder decir siempre que lo conseguí», declaró en Francia. Lo logró. Ahí se acordó del entrenador australiano que cuando tenía quince años le descartó en el último momento de un campeonato nacional de Australia. «A estas alturas necesito jugadores que sepan de este juego y creo que tú nunca podrás hacerlo».

Moneke tuvo una irrupción tardía en el baloncesto. Hasta los 13 años jugaba al fútbol, y, pese a nacer en la capital de Nigeria, a los 17 ya había vivido en los cinco continentes. Hijo de diplomáticos, acabó su formación en Estados Unidos, dónde regresaría para cumplir su sueño de la NBA tras tres años en modestos equipos franceses (Rouen, Denain, Quimper y Orleans) y uno en Manresa.

En enero de 2023 fue cortado por los Kings y el Mónaco se hizo con sus servicios. Tuvo destellos del jugador que encandiló en Manresa, donde se convirtió en un ídolo de masas, pero Sasha Obradovic no le dio continuidad y apenas participó en el tramo final de temporada.

Una vez sellada este miércoles la desvinculación con el conjunto del Principado, el Baskonia ha anunciado su aterrizaje en Vitoria. El carismático interior nigeriano, según dejaba entrever en su cuenta de Twitter, estaba deseando que su fichaje fuera oficial para reivindicarse en el Buesa Arena tras una carrera repleta de idas y venidas.

Con su fichaje, el quinto tras Rogkavopoulos, Mannion, Khalifa Diop y Codi Miller-McIntyre, el Baskonia obtiene su jugador número doce. La idea de la dirección deportiva que encabeza Félix Fernández es volver a contar con una plantilla con trece integrantes. El objetivo es incorporar un base que vendría a ocupar el hueco de Darius Thompson, con el condicionante de que apenas hay directores orquestas de ese calibre en el mercado y la ventaja de todavía disponer de una ficha de extracomunitario libre.