
Matt Costello ha recibido el cariño del Buesa Arena por primera vez desde su particular salida de Vitoria. Pasar de disputar la Euroliga a competir en la Eurocup no fue problema para el interior de 31 años, que puso rumbo al Valencia pese a los intentos baskonistas por renovarle. La presentación de la plantilla del Valencia Basket, en la que el club de Zurbano se ha acordado de las víctimas y los afectados de la dana, ha servido de termómetro para comprobar la reacción de la afición azulgrana tras su partida a tierras mediterráneas.
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La respuesta ha sido agradable para el jugador, aplaudido por los miles de espectadores que en estos instantes ocupaban sus butacas. Lo mismo ha ocurrido con su ahora entrenador Pedro Martínez, con dos cortas etapas de azulgrana. En el caso del interior de Michigan, su estancia en el Baskonia duró tres temporadas. En el club azulgrana debutó y se asentó en la Euroliga hasta convertirse en un pilar imprescindible para todos los entrenadores que pasaron en ese tiempo por el banquillo.
La intención de la entidad era renovar al estadounidense, pero tras la prematura eliminación liguera, Costello alcanzó un potente acuerdo económico con el Valencia, cercano a los cuatro millones de euros brutos por dos temporadas. De inicio, el club de Zurbano le incluyó en el derecho de tanteo, pero no le quedó otra que desistir en su intento ante la suculenta oferta taronja. La fiscalidad de Álava obligaba a abonarle un salario superior.
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Costello disputó 195 partidos con la elástica azulgrana, solo tres menos que Vanja Marinkovic. El serbio regresó a primeros de octubre tras su salida al Partizan y recibió un homenaje del club. El director deportivo Félix Fernández le entregó una camiseta conmemorativa con su número de encuentros, acto que el Baskonia ha optado por no realizar como ya ocurriera también con Rokas Giedraitis.
«Me ha escrito gente en Vitoria y me han dicho que tienen ganas de verme. Me hubiera gustado que tuviéramos más tiempo para ir a cenar y ver gente pero estaremos menos de 24 horas. Es especial volver. Tuve dos hijos aquí», expresó ayer Costello antes de llegar a Vitoria. Sus estadísticas esta temporada están algo por debajo de los 10 puntos y casi 5 rebotes que promedió con la elástica azulgrana, con unas características que se añoran en el nuevo dibujo baskonista como su capacidad para abrir las defensas con su amenaza en el triple o para alternar las dos posiciones interiores.
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