El manteo a Iñaki Williams tras el derbi

Dos socios del Athletic muy relacionados con la trayectoria de Williams en el club rojiblanco y en esta suma de partidos consecutivos se encargaron de hacer entrega al delantero de una camiseta conmemorativa con el 203 a la espalda, tras entrar en el campo en compañía de Nico Williams y del capitán, Iker Muniain.

Peio Ríos Demesa, de casi siete años, nació el 6 de diciembre de 2014, el día del debut de Williams con el Athletic. Iker Manjón Briones, de cinco años y socio desde los tres meses de vida, nació el 19 de abril de 2016, el día anterior a que Iñaki Williams iniciara en el Calderón la serie de partidos. Desde esa fecha, de la que se han cumplido 1.990 días, Williams participó en los cuatro encuentros que faltaban de aquella Liga, jugó todos los de las temporadas 2016-2017, 2017-2018, 2018-2019, 2019-2020, 2020-2021 y en las ocho jornadas disputadas hasta ahora por el Athletic en el actual curso.

Entre el homenaje previo y el que cerró la noche, Williams intentó sumarse a la fiesta con un gol que persiguió de principio a fin pero que se le resistió pese a tener sus oportunidades, alguna clara. La primera no tardó en llegar. Apenas habían pasado dos minutos cuando Muniain le envió un buen pase pero el delantero rojiblanco no acertó a controlar cuando se podía quedar solo ante Pacheco. En el 29 fue la segunda, cuando Dani García asistió a Williams, que sacó provecho de su principal virtud para escaparse en velocidad, pero no estuvo acertado en su intento de batir al guardameta del Alavés.

Lo cierto es que Williams fue el jugador más incisivo en el ataque del Athletic, con mucha movilidad como acostumbra y empeñado en buscar los espacios en una defensa alavesista que se mostró muy blanda en esa primera parte, como demostró en el gol de Raúl García al filo del descanso.

Con el marcador a favor, el Athletic salió en la segunda parte dispuesto a sentenciar el encuentro y, si no lo logró, fue en parte por la falta de acierto de Williams en dos claras acciones. En el minuto 52, un error en la salida de balón del Alavés lo aprovechó Dani García para recuperar, avanzar y ceder a Williams, que remata en carrera pero sin cruzar en exceso ante el portero rival. Y solo cuatro minutos después quizá la más clara de todas las que tuvo anoche. Iker Muniain se filtró con facilidad por la línea de fondo, cedió al '9' rojiblanco pero su remate, muy mordido, fue despejado por la defensa rival.

Marcelino, que confía plenamente en su delantero, lo mantuvo en el campo hasta el final del encuentro, momento en el que volvió a acaparar el protagonismo con la ovación de San Mamés y el manteo de sus compañeros. Williams, agradecido, recordó que «más importante que el récord era volver a ganar, así que nos vamos felices y orgullosos. Ha vuelto el público y cuando equipo y afición vamos de la mano, todo es más fácil», alabó.