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Dos acciones decisivas le convirtieron en el protagonista de la victoria de España en la Liga de Naciones. Y aunque Rodri fue elegido futbolista del torneo, la aparición estelar de Unai Simón en la tanda de penaltis le llevó a ser aplaudido por sus compañeros ... como uno de los héroes del título. También fue de los más aclamados ayer en la fiesta de la selección en Madrid. Majer se topó con su pierna y Petkovic vio impotente cómo detenía su gran disparo desde los once metros con lo que fue la parada de la noche. «He hecho muchas, pero esta está entre las más importantes de mi carrera», aseguró el artífice de que España vuelva a conquistar un título once años después.
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«Había estudiado a todos los lanzadores croatas excepto a Majer. Tenía que tomar una decisión, así que observé cómo colocaba el balón y pensé que tal vez tiraría al centro. Por eso estaba preparado para levantar los pies y parar cuando lanzó», dijo el portero alavés. Pero el asunto no había terminado. «Ayme (Laporte) me va a matar, pero mientras iba andando hacia el punto de penalti estaba pensando: ¿Qué voy a hacer ahora si falla?».
Laporte falló y Simón respondió con una parada a Petkovic que le permite cerrar la temporada en lo más alto, con un título, tras un curso de altibajos. En el plano deportivo, y a la espera de lo que decida la UEFA con Osasuna, el Athletic no consiguió cumplir con el objetivo de entrar en Europa. Y en el aspecto personal se le vio demasiadas veces en el banquillo. Ernesto Valverde decidió repartir el protagonismo de sus porteros entre Liga y Copa y, de este modo, Simón se quedó sin jugar el torneo más querido por la afición rojiblanca y los propios futbolistas. De hecho, dos partidos tan trascendentes como los de las semifinales de Copa ante Osasuna los vio desde el banquillo.
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Además, el entrenador del Athletic entendió que para que sus dos guardametas estuvieran listos para competir lo mejor era que rotaran cuando la Liga tuviera partidos entre semana. Y dio igual qué tipo de duelo fuera, porque Julen Agirrezabala fue titular en el decisivo enfrentamiento de El Sadar, donde Osasuna superó 2-0 a los rojiblancos. Así las cosas, Simón sólo ha jugado este curso 31 partidos, todos de Liga, su cifra más baja desde que en la campaña 2019-20 se consolidó como primer guardameta del Athletic. Y aunque el de Murgia es un profesional discreto que ha asumido sin queja la situación, llama la atención esas pérdidas de titularidad mientras tanto Luis Enrique como De la Fuente han apostado sin dudar por él. ¿Soportará en silencio si esas situaciones se repiten en la campaña venidera? Eso, sólo el tiempo lo dirá. Pero lo hecho en la final de la Liga de Naciones le hace subir un peldaño en su cotización. Se ha situado en primera línea del escaparate internacional. A la vista de los mejores equipos de Europa. Tiene aún dos años de contrato con el Athletic y carece de cláusula de rescisión.
Que Simón siente a su club como ninguno ha quedado de sobra demostrado tanto por sus declaraciones, en las que siempre ha mostrado su deseo de completar su carrera como rojiblanco, como por su última renovación, cuando se convirtió en uno de los jugadores que aceptó eliminar cualquier blindaje. Era una forma de responder a lo que ha hecho el Athletic por él, según explicó, desde que llegó con 14 años a Lezama. «No conozco más clubes, pero es difícil que otro haga lo que ha hecho el Athletic por mí». El portero de Murgia ha explicado en diferentes ocasiones que la «primera orden» que dio a sus representantes fue que si recibían interés de otros clubes «la prioridad es siempre el Athletic». «Nunca he sabido de ofertas de otros equipos. Quizás ellos sí, pero no me las han hecho llegar. La prioridad es el Athletic y así seguirá siendo. Estaré en el Athletic hasta que me quieran», ha insistido.
Esa declaración de intenciones se antoja fundamental de cara al futuro después de actuaciones como la del domingo, que elevan el caché de un guardameta que acaba de cumplir 26 años y tiene una larga trayectoria por delante. Su contrato expira en 2025 tras renovar en verano de 2020 y más de un club de primera fila tendrá en su agenda el nombre de un guardameta que, pese a su gran rendimiento, puede volver a perder protagonismo si Valverde repite su política de rotaciones.
Tras lo visto este curso, nada hace pensar que el técnico cambie de idea y más teniendo en cuenta la posibilidad de que finalmente el Athletic juegue en Europa. ¿Aceptará entonces Simón anteponer su amor a los colores rojiblancos a su presenciar algunos partidos desde el banquillo? ¿Asumirá de nuevo el rol de jugar la Liga y esperar su oportunidad en las otras dos competiciones con una Eurocopa en el horizonte del verano de 2024? De dos respuestas afirmativas depende que el Athletic mantenga alejado del foco de los grandes clubes europeos a una joya como Unai Simón, el portero titular de La Roja que voló en Rotterdam para conquistar la Liga de Naciones.
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