Marcelino se sentó en la sala de Prensa con una demanda. «Tenemos que llenarnos de positividad», pidió nada más encender el micrófono. Pero llevaba siete minutos en el mismo sitio y constató que las cuestiones que le planteaban los periodistas insistían una y otra vez ... en el sufrimiento final. «Hemos ganado y todas las preguntas van en el sentido de que nos han podido empatar», se quejó con tono educado.
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El entrenador del Athletic quiso poner en valor lo mejor de los suyos. «Es una prueba de madurez del equipo». Marcelino cree que lo sucedido en los dos últimos partidos pasó factura anímica a los suyos. Raúl García, el goleador, lo resumió de la siguiente manera poco después: «A veces hay que tragar desde dentro cosas que no son justas».
Marcelino mantiene que a los suyos a veces les pesa mucho la responsabilidad. «Los jugadores deben disfrutar más de lo que lo hacen porque la necesidad del resultado y las obligaciones nos juegan malas pasadas. Hay que recuperar la frescura. En este partido hemos dado un paso importante».
Y advirtió de que llegarán momentos mejores, que los suyos se soltarán cuando la carga de la responsabilidad les pese menos. «El día que metamos dos goles posiblemente metamos cuatro. En el partido ante el Mallorca tras anotar el segundo hicimos un gran juego».
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El técnico asturiano puso especial empeño en que se valore lo bueno que ha hecho su equipo hasta ahora. Y para que quede claro cómo ve las cosas, resaltó los aspectos que considera más positivos. «Lo normal es que el equipo conceda muy pocas ocasiones y que nos metan muy pocos goles». No le falta razón. Sólo el Sevilla (dos) y el Villarreal (tres) han encajado menos que los dos porteros alineados por el asturiano esta campaña.
Los rojiblancos cierran la octava jornada con 13 puntos. «Estoy muy satisfecho por el rendimiento del equipo hasta ahora. Llevamos ocho partidos, siete partidos buenos y una cagada ante el Rayo», resumió de forma gráfica.
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La apuesta por los jóvenes es incuestionable. Ayer jugaron Vivian, Zarraga, Nico Williams y Vencedor. El entrenador recordó que desde su llegada tenía claro que tirar de la cantera era el camino, aunque a veces den sobresaltos como cuando Zarraga lanzó un centro a nadie en el minuto 90, lo que dio paso a un peligroso contragolpe del Alavés. «Hay dos soluciones: ponerlos y ayudarlos o no ponerlos. Y yo creo que hay que ponerlos. Es la filosofía que tenemos. Los chicos tienen que jugar minutos para dominar estas situaciones».
Marcelino reveló sus planes para estas tres semanas sin jugar que le esperan al Athletic -por el parón de selecciones y por la probable suspensión del duelo ante el Madrid porque tiene internacionales que juegan en Sudamérica-. El técnico quiere un amistoso, pero no uno cualquiera. Dice desear un «partido atractivo si nos surge». Eso apunta a una posible salida al extranjero.
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Por su parte, Javier Calleja defendió el partido de los suyos, pero lamentó la forma en la que el Alavés cedió el gol. «Nos han marcado en un córner. Con un fallo de concentración de nos ha ido el partido de mala manera», se quejó. «Hemos dado la cara y el trabajo de los jugadores fue excelente», se felicitó.
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