Llega a San Mamés el Villarreal de Marcelino, el principal rival del Athletic por la Champions

Son tres puntos y dos partidos más los que tiene el Athletic sobre el Villarreal, una eventual ventaja que podría confirmarse este domingo (16.15 horas) si los de Ernesto Valverde superan a los de Marcelino en un duelo que se ha convertido en una final anticipada por la cuarta plaza. Es decir, por la Champions. Una victoria se traduciría de manera definitiva en el objetivo de competir una década después en el mejor torneo de clubes del mundo, mientras que una derrota no echaría los planes al traste pero sí chocaría con una 'dura' realidad: la de que el conjunto rojiblanco opta a llegar lejos en la Europa League y la Copa, mientras que al Submarino Amarillo solo le queda la Liga, con el alivio a la hora de dosificar esfuerzos que eso supone. No compite por el Viejo Continente y el Pontevedra, de Segunda Federación, le apeó de la Copa esta semana.

Marcelino se reencontrará con San Mamés ocho meses después de hacerle el pasillo por la Copa a los que fueron sus jugadores durante año y medio. Aquel 14 de abril fue la primera vez que se enfrentó al Athletic desde su salida en 2022. El asturiano se tomó un año sabático y luego cogió las riendas del Olympique de Marsella, una etapa efímera de 89 días. Apenas dirigió al conjunto francés en siete partidos y dimitió ante las amenazas de sus ultras, de los más temidos en Europa. Eso fue en septiembre de 2023, dos meses antes de llegar a La Cerámica tras la destitución de Pacheta. Se encontró a un equipo deprimido que deambulaba por la zona baja de la tabla y lo revivió hasta rozar la clasificación europea.

Se estrelló, como hace unos días, en Copa ante un rival de menor categoría. Fue el Unionistas el que le dejó fuera en dieciseisavos en la tanda de penaltis. Ahora ha caído una eliminatoria antes ante un Segunda Federación como el Pontevedra, potencial rival del Athletic en el sorteo del lunes (13 horas). En Europa fue precisamente el Olympique de Marsella, en octavos, el que terminó con la aventura del conjunto castellonense. Ahora, sin ni siquiera haber acabado el año, no tiene más distracciones que las 24 jornadas que le restan en el campeonato doméstico, en el que está demostrando un espectacular estado de forma. No se ha bajado nunca de las posiciones europeas.

De hecho, llegará a La Catedral el tercer mejor visitante de la Liga. 14 puntos en 7 jornadas que solo superan el Atlético (15 en 8, tiene peor media) y el líder Barcelona (22 en 10). Únicamente sucumbió en el Bernabéu y fue capaz de asaltar el Sánchez Pizjuán, entre otros. Ahora le llega una dura prueba ante el segundo mejor combinado ante su público (18 en 9, por detrás del Madrid; 21 en 8). En resumen, uno de los locales más en forma contra uno de los visitantes más seguros. Marcelino ha dotado a su equipo de una gran personalidad. Se trata de un bloque ordenado que concede poco y que, con un Baena en estado superlativo, es vertiginoso de medio campo en adelante.

El entrenador que trabajó en Lezama una temporada y media disputará su partido número 23 ante el Athletic, contra el que se estrenó hace 18 años a los mandos del Recreativo. En 2008 su Racing fue capaz de tumbar en los cuartos de Copa al conjunto que entonces dirigía Joaquín Caparrós. No le volvería a hincar el diente hasta 2015, precisamente con el Villarreal que hoy dirige. Le ganó en dos ocasiones, pero nunca en San Mamés. De hecho, ninguna de sus seis victorias ante los bilbaínos se produjo en La Catedral. Ocho empates y ocho derrotas completan la hemeroteca.

¿Y qué hay de sus particulares duelos ante Valverde? En la extensa trayectoria del de Viandar de la Vera solo hay un entrenador al que se ha enfrentado más veces que Marcelino: el 'Cholo' Simeone (24). Mañana se producirá el vigésimo combate ante el asturiano. El primero fue un Recreativo-Espanyol que acabó con victoria perica en 2007. Volvieron a cruzarse cuando el de Careñes cogió las riendas del Racing y luego estuvieron seis años sin medirse. Hasta que Txingurri regresó a Bilbao y Marcelino vivió su primera etapa en Vila-Real. Más tarde, fruto de los caprichos de la Copa, se midieron siete veces en dos temporadas a los mandos de Valencia y Barcelona. De todos ellos solo hubo una victoria che, una de las más dolorosas de la época de Valverde en Can Barça: la final del torneo del k.o. de 2019, resuelta por 2-1 en el Benito Villamarín.

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