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La Catedral estalló de júbilo. Juan Lazkano

51.000 gargantas para una batalla muy hermosa

Nunca falla ·

San Mamés vuelve a dar una muestra de fidelidad con unas gradas llenas a pesar de la hora y de que hoy es día laborable

Jueves, 25 de enero 2024, 00:58

En el derbi ante la Real Sociedad, San Mamés se quedó a poco menos de cien espectadores de batir su récord de asistencia a un partido de fútbol. Pues bien, este miércoles la cita era ideal para superar marcas: la de la noche más feliz ... de los últimos años, que se batió o estuvo apunto de hacerlo; y la de aforo. No pudo ser: 50.953 pulmones, la tercera mejor entrada de la historia de La Catedral.

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El reto parecía complicado: a pesar de que se trataba de un encuentro que despierta pasiones en la afición rojiblanca y que, encima, coincide con un momento deportivo pletórico de la tropa de Ernesto Valverde, la tardía hora antes de una jornada laborable hacía presagiar que el récord no corría riesgo. 51.544 era la cifra a batir. En el derbi ante la Real estuvo a punto de conseguirse, pero acudieron 69 personas menos de las necesarias. «No son horas, pero el Athletic merece nuestro esfuerzo», decía en las redes una aficionada.

El multitudinario paseo del Athletic desde el hotel Carlton hasta San Mamés, escoltado por varias patrullas de la Ertzaintza, estuvo lleno de colorido y cánticos de apoyo al equipo de cara a la batalla contra el Barcelona. Uno de los puntos de mayor afluencia de seguidores fue el tramo final de la Gran Vía –cerca del Sagrado Corazón– donde la Herri Harmaila había convocado una quedada con bufandeo para aclamar a los leones camino de La Catedral. Piel de gallina. Emoción a raudales. Y banderas, muchas banderas y el cielo rojo por las bengalas.

El ambiente fue impresionante, de los que es imposible olvidar. Difícil de olvidar el antes, el durante y el después. Sólo hubo un punto negro en un día que fue de fiesta y que acabó en celebración. En el trayecto al estadio, algunos aficionados aprovecharon la masiva presencia de público para patear uno de los vehículos de la Policía autonómica. Los autores rompieron una de las lunas y causaron daños en la chapa.

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La mayoría de athleticzales se dedicó a aclamar a sus jugadores con cánticos como 'Lo lolololololo Athletic Club' y ánimos a Iñaki Williams, que había regresado por la mañana de la Copa África. Merecieron la pena los 6.000 euros que costó el vuelo privado París-Bilbao. La verdad es que mereció todo la pena.

Hay quien piensa que los astros nos tienen guardada una sorpresa. Veamos, en mayo se cumplen 40 años del doblete, la última Liga y la última Copa que ganó el Athletic. 40 años de que la gabarra surcara la ría. ¡Ojo!

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