Gaizka Toquero | Jugador del Alavés en el último ascenso y ex del Eibar

Alavés-Eibar

«Mendizorroza va a ser un factor clave, es el campo que más aprieta de Segunda»

- ¿Qué impresiones le quedaron tras la ida?

- Buenas. Es un partido igualado donde el Alavés se pone por delante con un muy buen gol de Sylla. Luego la pena es el del Eibar, que justo llega en el peor momento, antes del descanso. El Alavés hizo un gran partido para ser fuera y deja todo abierto, que con un empate le es suficiente.

- La igualdad es tremenda. ¿Espera algo así mañana?

- Va a seguir siendo como todos los partidos entre ambos. Muy cerrados, donde no hay muchísimas ocasiones. Y es cierto que el que pegue primero va a tener muchas opciones de llevárselo. Tiene una cierta ventaja el Alavés, pero va a ser un partido muy cerrado con no muchas ocasiones. Lo va a decidir un error o la paciencia del que sepa jugar en esos momentos de nerviosismo.

- Con juego les ha costado.

- El gol del Alavés es un saque de banda y el del Eibar igual. Pero es que ya en casi todos los partidos deciden errores. Muchos de los goles llegan por errores del rival y no por acierto tuyo. Es muy difícil que un jugador se vaya de cinco y la meta por la escuadra. Son jugadas de estrategia, fallos, el nerviosismo... Hay que manejarlo y sobre todo ahora, que no tienes margen de error. Es lo que suele decantar las eliminatorias.

- Está el tema de que no haya penaltis tras la prórroga, lo que sobre el papel beneficia al Alavés. ¿Cómo debe gestionar eso?

- Tengo muy claro que no puede salir a empatar, para mí sería un error. Estás en casa y tienes que salir a ganar. Sabiendo que si encima te adelantas tienes la opción de tener un error y que te empaten. Entiendo que Luis García y los jugadores van a salir a meterle ritmo al partido y a ponerse por delante. A apretar al Eibar, que juega fuera y que en los primeros minutos seguro que está a la defensiva. Pero sin volverse locos ni arriesgar. Tampoco necesitan tres goles. Lo que tienen que hacer es apretar arriba e ir a por el partido pero sin descuidase atrás ni arriesgar en exceso.

- También el factor Mendizorroza, que usted lo conoce bien.

- Por supuesto, será clave. Mendi es el campo que más aprieta en Segunda. Y eso lo saben los jugadores y el cuerpo técnico. Que va a estar con ellos, y más en una noche tan especial. La ciudad está con ganas de ver al equipo en Primera.

- ¿Cree que se parece en algo el Alavés actual al suyo, con el que ascendió en 2016?

- Hay semejanzas. No éramos un equipo con mucho gol, como le está pasando ahora. No es un Granada o Levante. Éramos muy fiables, era muy complicado hacernos gol. Tuvimos la suerte de poder quedar primeros. Luego hay un equilibrio entre veteranía y juventud, que creo que es bueno sobre todo en Segunda. Conocer la categoría es importante, pero también gente con ganas.

- Como recuerda, se ahorraron el sufrimiento de la promoción.

- Son complicadas de jugar. Yo lo hice con el Zaragoza. Quedamos terceros, con un vitoriano como Natxo González en el banquillo, y a las primeras de cambio el Numancia nos eliminó. Encima en casa. Hicimos como el Alavés, un 1-1 fuera. En la vuelta fuimos superiores, no conseguimos acertar y nos quedamos fuera. Tener un empate fuera y el factor campo todo el mundo lo quiere, pero puede pasar que el Eibar te gane. Son partidos muy complicados. En estas eliminatorias el tema mental es muy importante y también cómo lleguen físicamente.

- Juli decía hace unos días en EL CORREO que el año del ascenso fue «inexplicable», que nadie contaba con lograrlo. ¿Coincide?

- Totalmente. Cuando salí del Athletic y valoraba la opción del Alavés en ningún momento se hablaba ni de play off. El objetivo era asentar la categoría. El club venía de una situación mala después de lo de Piterman, de mucha inestabilidad. Se intentaba la permanencia y estabilizar el club. Y poder ese mismo año subir a Primera siendo primeros y todo... ni en los mejores sueños entraba. No solo nosotros, tampoco en las personas del club.

- Usted fue el máximo goleador con nueve tantos. A los delanteros ahora parece que les cuesta.

- La Segunda es complicada. Tampoco creo que el Alavés haya tenido un goleador de referencia. Eso no quiere decir que seas mejor o peor equipo, hacen otra labor. Y ha habido lesiones en esa delantera. Sylla se ha perdido un montón de partidos, Miguel algunos, Villalibre ha llegado en enero... Es complicado buscar la continuidad y los goles. Pero creo que también otros que no son delanteros han aportado goles. Ha sido un equipo muy, muy fiable y por eso ha conseguido estar hasta la última jornada con la posibilidad de ascender directos.

- Aunque fue más breve y años antes, también ha jugado en el Eibar.

- Esos cuatro meses que estuve fueron una muy buena experiencia. Fue en la 2008-2009, cedido por el Athletic. Metí cuatro goles. Llegué a últimos de agosto y el 3 de enero ya estaba debutando con el Athletic. Tengo un muy buen recuerdo, con grandes compañeros con los que tengo amistad. Es un club como una familia. Ahora me siguen hablando de que es un equipo muy familiar, parecido a Alavés o el Athletic. Comíamos en un txoko después del partido, que unas mujeres nos hacían comida casera. En el mismo Ipurua había unas habitaciones.

- Fue su trampolín a la élite.

- Me vino muy bien. Lo necesitaba. Hay veces que no vemos que un paso atrás en un momento dado pueden ser dos para delante en pocos meses. Pasaba del Sestao, de Segunda B, a Primera con el Athletic. Y lo digo como lo siento, a mí en ese momento el Athletic me quedaba grande. Competía con Etxeberria, Llorente... habiendo estado un mes de pretemporada. Creo que ese paso por Segunda y el Eibar me hizo crecer muchísimo como jugador. Joaquín (Caparrós), que estaba de ese momento de entrenador del Athletic, vio como crecí y por eso el 3 de enero tenía claro que estaba listo para poder aportar.

- ¿Al Eibar lo ve escarmentado tras el mazazo del año pasado?

- Sí, pero seguramente estén pensando en eso. Durante el partido no, pero a lo largo de la semana cuando lo preparas estará presente en los que estuvieron. Es cierto que depende cómo seas puede jugarte a favor o en contra. Es decir, una revancha y decir 'tenemos que darle la vuelta' o 'como nos vuelva a pasar lo mismo...'.

Toquero tuvo que dejar las botas de forma prematura tras una larga carrera y más de 400 partidos profesionales, con debut en la Champions incluido. Lo hizo en 2019, tras una temporada en blanco en el Zaragoza por un problema recurrente de rodilla que no terminó de sanar. Pero sigue muy vinculado al balompié. Lo hace por medio de una agencia de representación, TS Sport Management. Pero también se ha aventurado a entrar en los medios de comunicación para comentar partidos e, incluso, lanzarse a un atrevido proyecto en la otra punta del mundo para fomentar el fútbol. Así que atiende al EL CORREO «en la oficina, que hay movimiento».

- No se aburre.

- No me aburro, no. Estoy entretenido. Con representación, asesoría, el mes pasado trajimos a unos cuantos niños indios a Valencia, en la tele... Haciendo un poco de todo.

- Hábleme sobre su proyecto para potenciar la formación futbolística en India.

- Surgió por un contacto que tenía en la Federación de allí. Estuve en enero e hicimos unas pruebas. Conseguimos traer a 18 niños en mayo. Han estado todo el mes. Y parece ser que va a venir otro grupo a entrenar en octubre, para que los chicos aprendan. La primera experiencia ha sido muy buena.

- Cuando jugaba, ¿le interesaba el tema mediático? ¿Se veía ahí?

- No. La verdad es que no he ido buscando nada. Me llamaron para empezar con la Copa y luego ya cuando Dazn cogió la Liga. Estoy a gusto, no me cuesta nada hacerlo. La verdad es que no me supone ningún esfuerzo.