El Alavés se desintegra

Hundido en una segunda parte aciaga.

Marcó el conjunto nazarí nada más empezar la segunda mitad y el conjunto albiazul se derrumbó. Sin remedio. Un castillo de naipes. Ni un atisbo de reacción.

Pero sí que hubo que lamentarlos. Porque una concesión defensiva propició el 3-0. Y porque

No había empezado mal la tarde. Porque la gran ocasión de la primera parte fue albiazul. En el minuto 3.

Las segundas jugadas en las caídas fueron la otra carta ofensiva del Alavés, que dominó esa faceta durante muchos minutos. Presión en campo contrario y recuperaciones en zona peligrosa, aunque no se tradujeron en ocasiones.

La lesión de Pina cambió el panorama. Descolocó al Alavés. Le desordenó. Perdió el control en el epicentro del juego y el conjunto nazarí empezó a percutir por las bandas.

Pero todo cambió a peor. A mucho peor. Y sin tiempo para asentarse de nuevo en el terreno de juego (minuto 47). Un 'dos contra uno' sobre Adrián Marín -Luis Rioja había perdido el sitio en la presión-

El segundo gol le mató apenas diez minutos después. Manu calcula mal a la hora de intentar el despeje en un córner, el balón le roza en el brazo y el árbitro señala un penalti que muchos jugadores no entendían. Otro contratiempo que borró al conjunto vitoriano del partido. También se borró poco después Wakaso, que no midió bien su ímpetu con una amarilla y vio la segunda.

...

• Temas
• Deportivo Alavés
• Granada ciudad
• fútbol
• Primera División