Girona 3-0 Alavés

El Alavés contribuye al lucimiento del líder

No era precisamente la noche para romper la racha negativa a domicilio. La que dice que el Alavés sólo ha logrado tres puntos a domicilio y no gana fuera en Primera desde octubre de 2021. Casi todo apuntaba hacia la derrota, igual que sucederá este jueves frente al Real Madrid en Vitoria. Y es necesaria la mejor versión alavesista para alterar este tipo de pronósticos.

Ayer lejos estuvo de presentarse. Frente a un Girona que gobernó con autoridad desde el balón. Bien abierto el campo, con una notable salida de la pelota, individualidades (Miguel, Couto o Savio) para desequilibrar y bastante acierto rematador.... Para reducir prácticamente a cenizas a un Alavés que apenas pudo recuperar balones ante la precisión local en las combinaciones y buscó a Samu demasiado rápido y sin elaboración. Un cabezazo del melillense fue de lo poco interesante mientras existió partido.

Tras la sanción de Abqar, Luis García Plaza, ayer en la grada, había anunciado la titularidad de Duarte para ocupar el eje de la zaga junto a Rafa Marín. Guevara regresaba al equipo y el preparador albiazul también introdujo otra novedad: la inclusión de Tenaglia en sustitución de Abde. Para adelantar la posición de Gorosabel y formar un doble lateral o añadir un tercer central por la temible banda izquierda que formaban Miguel Gutiérrez y Savio. El Girona se presentaba con las importantes ausencias de dos de sus grandes bazas de ataque, Stuani y Tsyhankov, pero le sobró fondo de armario. Tiene esta escuadra de Míchel ropa para todas las estaciones y en abundancia. No hay casualidades con un líder después de 17 jornadas.

No funcionó el Alavés por ningún costado. Su habitual poderío en el centro del campo con Guevara, Blanco y Guridi se diluyó, como Luis Rioja, ante un adversario versátil e incisivo. Quizás Javi López, pese al penaltito cometido y algunos errores con el balón, fue de lo poco insistente y mínimamente atinado por parte albiazul. Ni Hernández Maeso, el colegiado del partido del ascenso, resultó ayer talismán. Tampoco varió una tendencia ya manifiesta. Los problemas alavesistas para marcar. Cádiz, Mallorca y Alavés, con solo 14 goles en 17 encuentros, ocupan el podio que nadie desea. Ayer, Duarte rozó el tanto en un disparo que chocó contra el larguero, ya con el 3-0.

El doblete del ucraniano Dovbyk y el tanto de un Portu que estrenaba titularidad con el Girona habían colocado antes el partido a una distancia sideral. Para dar descanso a algunos y oportunidades a los Hagi, Sola, Abde, Kike García o Benavídez. «Vamos a dar la cara», decía el uruguayo cuando saltó al césped. No hay duda de que el Alavés lo hace, aunque de vez en cuando reciba sonoros bofetones.

Perder partidos y hacerlo en ocasiones por manifiesta inferioridad forma parte del día a día albiazul. También recuperarse con rapidez, lo que ahora toca en apenas 48 horas de margen. Otro coco, el Real Madrid, llama a la puerta de Mendizorroza el jueves. En un inquietante final de año donde la distancia sobre el descenso se estrecha.