El 1x1 del Girona-Alavés: Antonio Blanco, correcto en una tarde gris. Y tú, ¿quién crees que ha destacado?

Poco pudo hacer en los tres goles, en acciones de mérito del equipo local. Dejó algunas buenas intervenciones para evitar que el castigo fuera mayor y, en general, transmitió seguridad bajo palos.

Ante la ausencia de otras alternativas, le tocó ejercer como central. Tampoco fue un partido fácil para él, pero no dejó errores de bulto en su parcela y quiso ser pegajoso en la marca con los móviles atacantes locales. Se topó con el larguero al final.

Desplazado al perfil derecho del centro de la defensa para dejar espacio a Duarte. Por perfil físico, se emparejó durante muchos momentos con el complicadísimo Dovbyk. Dejó algunas acciones positivas, pero también sufrió como el resto.

No tuvo ninguna incidencia ofensiva hasta el tramo final dado el dominio del Girona y sí que se vio obligado a defender mucho. Sufrió con Couto, lateral pero con muchísima incidencia ofensiva. Cometió sobre el brasileño el penalti del 3-0.

Volvió al once titular como lateral derecho y con uno de los desafíos más complicados de la Liga: intentar parar a Sávio. El extremo fue un continuo quebradero de cabeza, aunque el argentino pudo contar con el apoyo de Gorosabel.

Compartió once titular con Tenaglia, aunque el guipuzcoano jugó más adelantado, en un puesto híbrido entre carrilero y extremo. Aunque apenas tuvo oportunidades de prodigarse en ataque y sí le tocó ayudar para frenar a Sávio y Miguel.

Mucho menos protagonismo con el balón que de costumbre dadas las bajas cifras de posesión del equipo vitoriano. Sí que quiso proponer cuando logró hacerse con el balón, pero en muy pocas ocasiones dispuso de tiempo y opciones en campo rival.

Quiso ayudar al equipo a sacar el balón y buscó transmitir calma para escapar del asedio ofensivo del Girona. Hizo lo que pudo, aunque le tocó trabajar más en defensa, donde logró algunas buenas recuperaciones.

Necesita el balón para brillar y contra el Girona apenas pudo soltarse en algunos contraataques durante la primera mitad. El resto del tiempo le tocó trabajar en una presión que no surtió efecto. Se fue a falta de media hora; tiempo para descansar.

Obligado a defender y sin apenas oportunidades de salir al ataque. Más opciones de correr con el 0-0, pero en ese momento tampoco encontró la claridad necesaria para hacer daño. Cambiado en el sesenta, tuvo minutos para descansar.

Algunos buenos acercamientos ofensivos.

Referencia ofensiva sin apenas opciones.

Discreto en su media hora de juego.

Fuerzas renovadas para el centro del campo.

Escasa presencia ofensiva en el tramo final.