Llega la hora de la verdad para el agro alavés. «Y estamos llenos de incertidumbres, hay una inquietud máxima, preguntes a quien preguntes», asegura el presidente de la Unión Agroganadera de Álava (UAGA), Javier Torre. Este verano «abrasador» en el que estamos inmersos no tiene ... precedentes para muchos de quienes llevan décadas y décadas ganándose la vida en el campo. «Tantos días seguidos sin llover, con temperaturas tan altas... Yo desde luego que no lo recuerdo», añade.
Publicidad
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) pone cifras a estas impresiones. Según los datos que ha registrado la estación de Foronda, este periodo mayo-julio -meses ya importantes para diferentes cultivos- ha sido el más caluroso desde 1973 y el más seco desde 1945. Y los 28,5 litros de lluvia por metro cuadrado contabilizados en este trimestre son cinco veces menos de la cifra media, 146,7.
Las tormentas de esta semana han supuesto un «ligero alivio, claro, pero aún son insuficientes», confiesan viticultores de Rioja Alavesa que se juegan ahora el trabajo de todo el año. Y como ellos, los agricultores de girasol, que ya vienen de una cosecha de cereal «desastrosa»; los que cultivan la patata; los ganaderos, que también están sufriendo porque cada vez les cuesta más alimentar a sus animales...
La campaña de girasol viene «malísima», asevera el presidente de la UAGA con conocimiento de causa porque trabaja este herbáceo en Ribera Baja. «No vamos a llegar ni al 50% de la producción -de más de 2.000 kilos por hectárea a apenas mil- y en algunas zonas se perderá todo. Hay plantas asfixiadas, sin agua, y otras directamente quemadas. La pipa no tiene aceite por dentro», explica.
Publicidad
Noticia Relacionada
Los agricultores cerealistas también han sufrido un desplome histórico en la recolección del trigo, la cebada y la avena por encima del 40% debido, principalmente, a las olas de calor -han dejado temperaturas por encima de los 40 grados en diferentes puntos del territorio- y a la falta de humedad que han coincidido con los meses en los que se produce el llenado de la espiga. En este sentido, el forraje «ya empieza a escasear. Se hacen dos o tres cortes al año para guardar alfalfa de cara al invierno y alimentar así a los animales, pero ahora no será posible. El invierno puede ser duro para el ganado», detalla Torre.
Las campañas de recogida de los diferentes cultivos también están variando debido a unas condiciones meteorológicas poco frecuentes. Udapa, que gestiona 345 hectáreas de patata -casi un 30% de las 1.200 plantadas en Álava-, prevé un adelanto de al menos una semana en el arranque de los primeros tubérculos, «a últimos de agosto», según Jon Legorburu, técnico de esta cooperativa.
Publicidad
Será una cosecha más escasa «y podría reducirse en un 10% porque ya estamos viendo que hay menos patatas y que son más pequeñas. Las altas temperaturas influyen» de manera negativa, opina el experto agrícola. Aunque la calidad, por el momento, apunta a que será buena porque no está habiendo plagas ni enfermedades severas.
La sequía acaba con todo, también con los insectos. Pero, con los campos necesitados de agua, «los gastos se incrementan aún más», lamentan quienes están regando y ven cómo se les va el dinero en la electricidad o el gasoil que emplean en la maquinaria de bombeo. Está sucediendo en Rioja Alavesa, aunque al menos estos viticultores mantienen sus uvas en buen estado.
Publicidad
Javier Torre | Presidente de la UAGA
Jon Legorburu | Técnico de la cooperativa Udapa
Juan Luis Cañas | Bodeguero de Rioja Alavesa
Sin embargo, en líneas generales, «la gente está muy disgustada e inquieta. Hay una gran incertidumbre», avisa Juan Luis Cañas, experimentado bodeguero que lidera las firmas familiares Luis Cañas y Amaren en Villabuena y Samaniego. Aunque ha llovido «algo» en los últimos días en la comarca, el año está siendo «seco. Y se empieza a notar en el fruto. El grano es pequeño, la uva no pesa, puede que tenga azúcares pero por deshidratación. Y eso, en definitiva, es engañoso».
Todavía es pronto para hacer vaticinios sobre la cantidad y la calidad, aunque la Casa del Vino de Laguardia ya habla de un adelanto del inicio de la vendimia a los primeros días de septiembre. Cañas tiene claro que «el calor va a influir. Esperemos que llueva más en las próximas semanas, pero nos viene una campaña complicada».
Publicidad
28,5 litros de lluvia por metro cuadrado se han registrado en la estación meteorológica de Foronda entre mayo y julio de este año, cinco veces menos que la media en ese periodo (146,7 litros).
El trabajo primero en campo y luego en bodega «será arduo. Va a resultar más difícil hacer la fermentación de los vinos», confiesa Juan Valdelana, con bodega familiar en Elciego, que tiene la esperanza de que «agosto nos dé alguna alegría» en forma de tormenta «de agua pero sin granizo, claro». Rioja Alavesa no vivía un verano tan seco «en muchos años. Mi padre tiene 59 y dice que no recuerda algo así».
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.