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El palacio Zulueta tiene ya en marcha los trabajos de reforma para albergar al fin actividad tras años en desuso. La villa de La Senda se convertirá en sede de las sociedades municipales Ensanche 21 y Gilsa, pareja de agencias locales que se trasladará al ... inmueble y a cuyo anuncio de 'mudanza' se ha sumado recientemente y por sorpresa la del Centro de Estudios Ambientales (CEA), también un organismo del Ayuntamiento. El edificio, del año 1903 y que es una de las pequeñas joyas del patrimonio local, debe someterse a importantes obras de remodelación que supondrán 5 meses y medio y 1,6 millones de euros para albergar a los funcionarios de los citados entes.
La obra. Intervención y acondicionamiento interior del palacio Zulueta y los edificios anejos.
Traslado. Se mudarán al inmueble las oficinas técnicas de la sociedad urbanística Ensanche 21, Gilsa (de suelo industrial) y el Centro de Estudios Ambientales (CEA). Todas son entidades del Ayuntamiento.
Las plantillas de las dos primeras empresas se moverán a la céntrica casona tras la compra del caserón Gure Txokoa de Fray Francisco, sus actuales dependencias, por parte de la también compañía municipal de aguas, Amvisa, por casi 4 millones. Esta última entidad trasladará allí a su personal desde sus oficinas de El Pilar. La 'mudanza' de Ensanche 21 a Zulueta se produciría este año, según el pliego de condiciones que rigió la compraventa del chalé junto al Prado. De su lado, el CEA irá a La Senda desde las instalaciones municipales de San Martín, donde se ubica ahora. Anteriormente este organismo ocupó la Casa de la Dehesa, en el parque de Olárizu.
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La intervención en Zulueta, adjudicada a finales del pasado noviembre a la firma Zikotz por 1,3 millones (1,6 al sumar el IVA), persigue acondicionar y mejorar la eficiencia energética del palacio, construido a principios del pasado siglo por el arquitecto Fausto Íñiguez de Betolaza y rehabilitado en 1991. Ahora, para la que será su segunda renovación, hace poco han arrancado los trabajos con la colocación del andamiaje y la retirada y desmontaje del interior del edificio.
Según el presupuesto recogido en el pliego de contratación, el listado de actuaciones incluye mejoras en climatización, cubierta, elevadores, iluminación, electricidad, carpintería, pintura y decoración y recuperación de elementos. Completan el listado la actuación exterior, albañilería, mamparas, vidrios e integración de servicios de telecomunicaciones, entre otros trabajos.
La reforma del palacio permitirá a la plantilla de Ensanche 21 «disponer de un espacio para el desarrollo de sus funciones, en especial la atención a la ciudadanía en temas relacionados con la rehabilitación del parque edificado de la ciudad, una vez enajenada por el Ayuntamiento su actual sede en el edificio Gure Txokoa del Paseo de Fray Francisco», transmitió el Gabinete Urtaran cuando informó sobre la adjudicación de las obras.
Ensanche 21 ocupará «aproximadamente la mitad del espacio útil del inmueble», por lo que el Consistorio «dispondrá de una amplia superficie para destinarla a otros usos de interés para la ciudad», agregó. Hace apenas una semana, el gobierno anunció de forma repentina que el CEA también llevará su sede al palacete.
El particular intercambio de oficinas municipales impulsado por el Gabinete Urtaran con Zulueta y Gure Txokoa evidencia los problemas del Ayuntamiento para convencer a iniciativas privadas para que inviertan en los edificios vacíos, por lo que se recurre a llevar allí a funcionarios de servicios ya existentes. Ello a pesar de que hace solo unos años se estrenó el gran complejo de oficinas municipales de San Martín.
Zulueta apenas ha albergado actividad de cara al público desde que la Fundación Sancho el Sabio lo dejara en 2009 para trasladarse al entorno de Krea, en Portal de Betoño. Hace años se barajó primero como sede técnica para el Auditorio de La Senda, proyecto de principios de milenio que hizo aguas. Después fue sede de la Green Capital durante el año de reinado verde europeo (2012) y su jardín se utilizó para eventos públicos como recepciones o entregas de distinciones como la Medalla de la ciudad.
Más recientemente, el caserón fue propuesto como centro del vino, un proyecto que el Consistorio tampoco supo llevar a buen término. Cuando el PNV resucitó el proyecto del Auditorio en La Senda también se planteó dar a Zulueta algún uso relacionado con el complejo. Más tarde se propuso como sede de la Policía Local, que finalmente se situará en el edificio que acogía el servicio de Infancia en José Erbina.
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