La exconcejala de Urbanismo del PNV recurre los cambios de Etxebarria en su departamento

La responsable de Urbanismo durante el segundo mandato de Gorka Urtaran pide a la alcaldesa socialista «anular» la creación de un equipo de Desarrollo Estratégico y Vivienda, que se aprobó este mismo verano. El área de Alcaldía tendrá un mes para dar respuesta a esta solicitud. En caso de no ser atendida o rechazada, acabará en los tribunales.

Aunque el recurso tiene un marcado carácter administrativo, al estar fundamentado en cuestiones de procedimiento y motivación, en su presentación subyace la reestructuración de los servicios técnicos. En este sentido, Oregi mantiene su cargo como jefa de Planeamiento y Ejecución de la Ordenación Urbanística, aunque contará con un equipo más reducido.

La creación del nuevo servicio se ha traducido en la reubicación de cuatro arquitectos y otro técnico de adminisración general. Esto implica reducir a la mitad los recursos humanos a cargo de Ana Oregi, que se queda con dos arquitectos (incluida ella) y otros dos técnicos de administración, según se refleja en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Ayuntamiento de Vitoria y en el informe que justifica la creación del nuevo servicio, elaborado por el actual concejal del ramo, Borja Rodríguez (PSE).

El recurso de reposición será en primera instancia de carácter interno, ya que se deberá resolver en el mismo órgano que ha emitido el decreto (en este caso la propia Alcaldía). Sin embargo, lo más probable es que se desestime y acabe en el contencioso-administrativo, ya que la única fórmula de evitarlo pasa por que el Gabinete Etxebarria dé marcha atrás a su propia decisión en cuestión de semanas.

La presentación del recurso ha tenido una repercusión directa tanto en el departamento de Urbanismo, por la relevancia de la figura de Ana Oregi como jefa de servicio, como en el propio Consistorio. Se trata de la concejala de Urbanismo durante el segundo mandato de Gorka Urtaran como alcalde de Vitoria (entre 2019 y 2023) y, sobre todo, es la artífice del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), todavía en plena tramitación.

Los últimos acontecimientos amenazan con incrementar la inestabilidad en el principal departamento municipal, que además ha estado sometido a numerosos cambios en los últimos meses. El más reciente se ha producido este mismo viernes, con el nombramiento de Mikel Intxaurbe como director general. El arquitecto sustituye a Susana Vizcarra, cuya dimisión «por motivos personales» se aprobó el pasado 2 de agosto. Antes también existió un relevo en la coordinación de este área, que pasó de manos de Carlos Ibarlucea y a Jon Kepa Zarrabe el pasado marzo.

La creación del servicio Desarrollo Estratégico y Vivienda ha despertado las dudas de la oposición. El PP denunció esta semana la apertura de lo que definió como una «ventanilla B» en Urbanismo, «con las mismas funciones» que el equipo dirigido por Ana Oregi. EH Bildu y Elkarrekin Podemos, por su lado, han registrado sendas preguntas en la comisión de Modelo de Ciudad del próximo lunes. Desde el Ejecutivo defienden que el nuevo servicio dota al Departamento de «una herramienta que hasta ahora no tenía el Ayuntamiento» al asumir competencias en materia de vivienda. «Este nuevo servicio asumirá la gestión, impulso y coordinación de las políticas estratégicas del Departamento y proyectos esenciales municipales», refuerza.

Oregi ha compaginado su labor técnica con la política durante toda su carrera. Comenzó como arquitecta del Ayuntamiento de Vitoria en 1991 y desde entonces ha alternado el Consistorio con el Gobierno vasco, donde llegó a ser consejera de Medio Ambiente y Política Territorial de 2012 a 2016, con Iñigo Urkullu como lehendakari. Tras su paso por el Parlamento hasta 2019, fue concejala de Urbanismo y teniente de alcalde con Gorka Urtaran la pasada legislatura, donde encabezó la revisión del Plan General de Ordenación Urbana, el documento urbanístico de mayor rango.

A las puertas del relevo en la Alcaldía en junio de 2023, la arquitecta regresó a su puesto como técnica en el departamento, tras la completa renovación del PNV en su lista electoral, donde sólo cuatro concejales repitieron en la candidatura.