Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
¿Truco o trato? Esa pregunta tan repetida cada 31 de octubre es también la que plantea la película de terror 'Historias de Halloween', puesta de largo de Kiko Prada (Oviedo, 1984), que se estrenará ese mismo día de este año y finalizó ayer su ... rodaje en Álava tras diecisiete días de grabación tanto por las calles de Vitoria como por Gometxa y Mendiola. «¡Acción!» ha sido el grito que se ha vuelto a escuchar en el valle de Ayala. En concreto por los pasillos del conjunto monumental de Quejana, el espectacular escenario con el que contaron las productoras Atlantika Films y The Other Side.
La elección del escenario por parte de esta producción que pretende convertirse en un gran evento coincidiendo con su llegada a la gran pantalla en Halloween da una pista del gran interés que está despertando como plató la provincia de Álava, que ha aplicado hace unas semanas los incentivos fiscales más altos de Europa al cine siguiendo los pasos de Bizkaia, donde el año pasado donde los días de grabaciones aumentaron en un 74%. Ese impulso al territorio alavés se empieza a notar. Tan solo en el último mes se han colocado las cámaras de hasta cinco ficciones ('Los últimos románticos' en Llodio; '8', en Artziniega; '¿Es el enemigo?', en Caranca; y 'Sin instrucciones', en Vitoria).
Es el mismo número en este trimestre que en todo el año pasado. Por lo que la cinta de Prada se suma a una tendencia en alza. Lo hace además con una particular apuesta. Es de los pocos filmes españolas que ha elegido Halloween como gran tema. «Tenía claro que quería hacer una película de evento», explicó el director asturiano a EL CORREO en un parón de la grabación de este martes. Las imágenes del rodaje se mantienen en secreto por motivos promocionales. ¿Género? «Terror, fantasía, comedia... No entiendo el terror sin un poco de comedia, por ejemplo. Creo que los buenos sustos llegan si hay una comedia previa», explica acerca de un largometraje que también habrá guiños a la mitología vasca como esos 'mamurrak', personajes de baja estatura a los que atribuyen poderes divinos. «Mi pretensión es entretener y que los espectadores se diviertan. Que la hora y media que dure la película se olviden de sus problemas», apunta el cineasta.
Noticia relacionada
Aunque la tradición de Halloween se ha reflejado ampliamente en la filmografía estadounidense a lo largo de las últimas décadas ('Donnie Darko', 'E. T., el extraterrestre'...) y ha habido taquillazos recientes como 'Halloween Ends', en España sigue siendo un terreno prácticamente virgen. La película de Prada arranca en una urbanización en la que un niño, Luis (Christian Thomas) vive con sus padres. La tarde del 31 de octubre, la madre de Luis (Macarena Gómez, conocida 'La que se avecina' y '30 monedas') le anima a que deje de jugar a videojuegos y se dedique a pedir dulces a los vecinos.
Allí, en el residencial, no triunfa. Así que el crío se acerca a la zona vieja de una ciudad que es Vitoria. En un anticuario regentado se topa con Ander, a quien da vida Javier Botet ('El último viaje del Demeter', 'REC', 'It'), reconocido actor con síndrome de Marfan, que le muestra los secretos el enigmático lugar. «El niño hace 'truco o trato' y termina en ese anticuario. Hasta ahí puedo decir», comenta Prada sin destripar la trama. Algunas pistas daban la tenue iluminación de los pasillos del palacio de Quejana, habitualmente con el acceso restringido, que se transformaron en una suerte de pasaje de terror.
Entre el amplio reparto también se encuentra la vitoriana Ariane Gaisán e intérpretes con una reconocida trayectoria como María Barranco, ganadora de dos Goya, Zorion Egileor ('El hoyo') o Aida Folch ('El artista y la modelo'). Ese reparto coral lo completan Lucía de la Fuente, Aida Folch, David Pareja, Mario Mayo, Carmen del Rosal, Elizabeth Anne Miller, Irene Molina, Desirée Balbás,, Eduardo Rosa, Gastón Haag, Ana Mari Ayala y Sofía García.
El director Kiko Prada –que se dio a conocer con 'Dorien', una serie que salió en 2017 para la plataforma Playz– apunta que ve similitudes entre el paisaje alavés y el asturiano. «Más que otras zonas del País Vasco», comenta. De hecho, la gran diferencia entre esta cinta y las otras cuatro es que la mayor parte de la grabación se ha llevado en Álava –con hasta 17 días de rodaje– y no han sido tan solo una sola o dos jornadas.
El valle de Ayala ya ha sido elegido en dos ocasiones más como decorado en poco más de un mes. Sañudo se puso tras la cámara en Llodio con 'Los últimos románticos', adaptación de la novela de Txani Rodríguez. Mientras que Medem eligió las calles de Artziniega hace unas semanas para '8', cinta protagonizada por Javier Rey y Ana Rujas. En ambos casos el grueso de la producción se concentraba en la provincia de Bizkaia.
Al mando de la productora Atlantika Films –con sede en Madrid y Getxo– se encuentra Nano Arrieta, productor conocido sobre todo por su labor junto a Fernando Trueba. Arrieta, zaragozano de padre vasco, destaca que los incentivos fiscales suponen una oportunidad para el territorio de «generar una industria potente» al igual que ha ocurrido en Bizkaia y «abren más» el abanico de oportunidades al resto del País Vasco. A su vez elogia la diversidad de los paisajes del territorio alavés, con una «luz distinta». «Estamos acostumbrados a rodar en Madrid y sentimos que el entorno natural se mezcla muy bien con lo urbano».
Este largometraje en Álava da otra pista de su tirón como un gran plató de cine con las mayores deducciones fiscales de Europa. La medida foral contempla deducciones de hasta del 60% para producciones nacionales e internacionales y del 70% para las películas en euskera. Tanto Diputación como el Ayuntamiento de Vitoria, a través de la Film Office, prevén un importante aumento del número de rodajes.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.