Calidad. Los productos ecológicos que se mostraron en la feria reunían una notable calidad nutritiva y eran muy saludables :: MORQUECHO
GUIPÚZCOA

La I Feria Ecológica enseña otra forma de vivir y trabajar los productos del campo

Urkizu acogió ayer un total de 29 stands de agricultores y ganaderos procedentes de diferentes municipios

ALBERTO ECHALUCE

Domingo, 23 de septiembre 2012, 04:16

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Los eibarreses pudieron entrar en contacto ayer con un total de 29 productores y vendedores de diferentes procedencias que ofrecieron productos agrícolas y ganaderos de alta calidad nutritiva, en base a una filosofía en el que todo se basa en dejar vivir, sin que la mano del hombre intervenga alterando en su desarrollo evolutivo final.

Cada productor y comerciante explicaba otra forma de vivir, muy alejada de intereses de la industrialización, y de la manipulación de alimentos, y de las demandas comerciales masificadas. Todo ello gracias a un proceso natural. Así, Joseba Baez contaba como compraba leche de vaca en la villa guipuzcoana de Altzo y en Orokieta, para hacer sus quesos en la quesería de Idiazabal que había heredado de sus antepasados. «Trabajo de una forma tradicional que ha estado a punto de perderse, pero que durante siglos ha sido el alimento de nuestros caseros, como el queso de leche de vaca. Después los quesos los vendemos en Ordizia y Bergara».

Una forma de trabajar en consonancia también con el respeto al medio ambiente y al ser humano en su necesidad y su derecho de alimentarse de forma lo más sana posible. En esta dirección, Gaizka Olabarrieta había comprado un caserío en la zona de Udalaitz y gracias a los frutos de unos manzanos antiguos producía botellas de zumo de manzana, «sin podas, ni tratamientos industriales, todo natural». Y lo cierto es que el zumo se convertía en una bebida de lo más saludable. «Produzco el zumo como la sidra, con la diferencia que se pasteuriza a 80 grados para no convertirse en alcohol».

De entre los expositores había una mayor presencia de puestos guipuzcoanos, aunque también están representados de otros pueblos. Isabel Villar tiene en Unanu, Navarra, un caserío en donde sus ovejas pastan por las laderas de San Donato comiendo hierba de praderas que cuentan con abonos naturales, ninguno de carácter industrial. Sus ovejas son de raza latxa 'cara negra'. En el corral cuentan con zonas de ordeño y elaboración del queso: primero cuajan la leche, luego 'cortan' ese cuajo para que la materia grasa se deposite al fondo bajo el suero y así poder separarlo y prensarlo para dar forma a los quesos. Luego hacen una salmuera con agua y sal en la que los sumergen durante varias horas.

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Además siguen procesos preventivos contra enfermedades, con el objetivo de impulsar la autocuración, para conseguir su recuperación. Pasados algunos meses el queso se va curando cubriéndose de un moho que luego quitan con cuidado cepillándolo y más tarde ya lo distribuyen principalmente en ferias y establecimientos cercanos.

Desde el Baztan, Eñaut Gorbea vendía jabones ecológicos que producían con aceite de oliva y aceite de coco, «todo ecológico», que tras pasar por una purificación era destilado y suministrado con las esencias, para ofrecer un olor sublime.

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Santi Monge era un fiel representante de la ganadería ecológica. Cada vez más, este tipo de trabajo se presenta como una alternativa a la explotación intensiva de los animales para alimentación.

También con otra forma de tratar a los animales, mucho más humana incluso, hacen posible el objetivo de explotar a los animales respetuosamente. Por ello no son pocos los consumidores que, preocupados por el sufrimiento de los animales, deciden comprar productos de este tipo de explotaciones como carne, huevos o lácteos.

Frecuentemente, estos consumidores son incluso animados por las organizaciones a mantener su consumo con una conciencia limpia. «Nosotros trabajamos el cerdo con alimentos sanos de bellota y piensos, y sin engordes intensivos. A partir de ahí elaboramos paté y chorizos». La I Feria Ecológica se completaba con productores de verduras, aceites, quesos, pasteles y unos incluso elaboraban rosquillas. También había un stand de la asociación eibarresa Aza ta Porrua, una nueva asociación que se ha puesto en marcha en Eibar con el propósito de fomentar entre los eibarreses el consumo de productos ecológicos.

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Salida montañera

Dentro de la programación organizada para hoy, tendrá lugar una salida montañera siguiendo el curso del río Abontza hasta Urko partiendo de Legarre. Con esta acción, se darán a conocer los distintos ecosistemas naturales que aún existen en Eibar y la compleja relación que tienen, desde tiempos inmemoriales, la actividad agroganadera y el entorno natural.

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